«Soy muy feliz por estar aquí en Valencia, en un club muy glorioso. Estoy con ganas de empezar a trabajar». Esas fueron las primeras declaraciones de Cesare Prandelli como entrenador del Valencia nada más firmar su nuevo contrato por dos temporadas. Dicho y hecho. El nuevo técnico se puso manos a la obra desde el primer día. Conoció con la presidenta Layhoon Chan en su primera comida de trabajo a las pocas horas de aterrizar, pisó el césped de Mestalla para conocer de primera mano su nuevo estadio, sin tiempo para descansar después de un largo viaje desde Singapur se desplazó a la ciudad deportiva de Paterna para tomar nota del filial. Este domingo culminó sus primeras horas de análisis de la situación viendo en directo el partido ante el Atlético en Mestalla.

Ya le avisó Miguel Ángel Adorno. El mítico jugador del Valencia se cruzaba el sábado con el técnico a las puertas del club. Suso García Pitarch se encargó de las prsentaciones. «¡Aquí tienes ´molto lavoro´!», le dijo Adorno al italiano con el corazón. Hay muchas cosas por cambiar. Cesare asintió con la cabeza. Asume la responsabilidad desde el primer día y, después de su presentación -este lunes a las 12:00- bajará al césped de Paterna para dirigir por la tarde su primr entrenamiento. Será a las 18:30 horas.

Prandelli aterrizaba el sábado a las 12:40 al aeropuerto Manises procedente de Singapur. Lo hizo en un vuelo regular vía Franckfurt. Allí estaba Suso García Pitarch esperándole.

Como había hecho dos horas antes con el resto de miembros de su cuerpo técnico: Gabrielle Pin, Renzo Ciulli, Valter Vio y Nicollo Prandelli. Los cuatro llegaron a las 10:45 vía Milán. Antes que Prandelli estaba previsto que llegara uno de sus agentes vía Roma. El primer día de Prandelli no hacía más que comenzar.

El italiano se reunió con su cuerpo técnico en el Restaurante ´Gran Azul´ de la Avenida de Aragón. Allí habían quedado a las dos de la tarde para comer junto a Layhoon Chan, Kim Koh, sus agentes y los abogados del club. Cesare conoció a la presidenta y disfrutó de su primer arroz valenciano. No será el último. Al filo de las cuatro, la comitiva se desplazaba al estadio.

Más concretamente a la puerta 3. Prandelli quiso pisar por primera vez el césped del que será su estadio y conocer el vestuario. El italiano recorrió todos los rincones del viejo coliseum con Layhoon y el propio Suso.

La siguiente parada eran las oficinas. Sin embargo, Prandelli tuvo la curiosidad de acercarse a la tienda de la calle Micer Mascó para empezar a familiarizarse con su nueva ropa deportiva.

Incluido el equipaje naranja flúor que sus jugadores vestirán cuando llegue la Copa del Rey. Después, entró en las oficinas para firmar su contrato. Era lo único que faltaba. Minutos después, el Valencia hacía oficial el fichaje. Por fin.

Horas después tenía oportunidad de vivir el valencianismo en primera persona y Cesare quedó sorprendido por el ambiente de Mestalla. A partir de ahora lo disfrutará o sufrirá desde el banquillo.