Cesare Prandelli comienza a hacer trabajo táctico con la plantilla. El técnico italiano ha esbozado en la tarde de este martes las primeras líneas de lo que pretende que sea su Valencia. El sistema utilizado durante las primeras pruebas realizadas es el 4-2-3-1, un dibujo en el que ha situado a Enzo Pérez y Mario Suárez como mediocentro y Parejo como mediapunta, siendo el argentino el encargado de ayudar a los centrales a la hora de sacar el balón desde atrás. En lo referente al ataque la principal novedad es que Prandelli ha situado a Rodrigo como delantero de referencia mientras que ha optado por escorar a Santi Mina, siguiendo la tónica de las últimas semanas primero con Ayestaran y después con Voro en el banquillo.

En cuanto a la defensa, el italiano trabaja con Garay como referencia y en la portería ha ido alternando a Jaume Domènech y Diego Alves. Todavía es pronto para comenzar a hablar de nombres para el once del partido de este domingo ante el Sporting de Gijón pero este sistema, con los primeros detalles tácticos, dejan entrever algunas notas de la libreta de Prandelli. El italiano, gesticulando, con el silbato en la mano y situado en todo momento en el centro de la acción, ha aprovechado para machacar uno de los ingredientes fundamentales de su fútbol: el bloque.

Cesare pretende recuperar al Valencia desde el orden y la intensidad -ha exprimido físicamente a la plantilla en los últimos entrenamientos- y ha realizado un ejercicio en el que ha incidido en la basculación, las transiciones, la salida se balón y especialmente, el equilibrio. Quiere armar un Valencia compacto y fiable. El técnico va recuperando efectivos a medida que avanza la semana y este martes por la tarde se han incorporado Munir -directo al grupo tras salir en la segunda parte ante Estonia con la Sub'21-, Gayà y Cancelo, que han realizado un trabajo específico de recuperación junto con Abdennour -llegado desde Túnez por la mañana- y los lesionados Nani y Mangala.