«Siempre estoy preguntando por los plazos para saber cuándo volveré, pero todavía es pronto para saberlo con exactitud». Ha pasado casi un mes y medio desde la noche en la que se lesionó el ligamento cruzado anterior y el colateral interno tras marcarle dos goles a Osasuna en su primera titularidad con el Leganés y todavía le queda por delante una larga travesía en su recuperación pero Rober Ibáñez ya comienza a pensar en su vuelta, prevista para la próxima pretemporada. «Tengo muchas ganas de volver a jugar», justifica.

Rober Ibáñez ya prepara su vuelta

Rober Ibáñez ya prepara su vuelta

El joven extremo del barrio de Sant Bult, que atraviesa por la fase más exigente de su recuperación a nivel psicológico, abre a SUPER las puertas de su casa, donde transcurre prácticamente su día a día al completo, descontando el tiempo que pasa en la Ciudad Deportiva haciendo sesiones regenerativas para recuperar su rodilla. «Para matar el tiempo juego a la PlayStation y veo fútbol, el que sea, me da igual si es la Bundesliga o la Serie A», explica el valencianista con la pierna derecha en posición de reposo. Su recuperación, tras ser operado por Cugat en Barcelona, marcha según lo previsto: le han retirado la escayola y en las últimas semanas ha recobrado elasticidad en la articulación.

"Al principio me costó asimilar todo esto"

"Es difícil por cómo pasaron las cosas. Había metido dos goles, estaba mi familia viéndome en el campo... Cuesta de creer... Más, por cómo lo había pasado en verano, donde no pude hacer casi pretemporada por una lesión, y venía de no pasarlo bien en Granada. Yo sabía que este iba a ser mi año. Tenía muchas ganas pero te toca ser fuerte para hacer una buena recuperación», relata el futbolista, que en el primer momento, cuando cayó al césped de Butarque durante los últimos minutos del Leganés-Osasuna, ya comenzó a temer que pudiese tratarse de una lesión de gravedad: «pocas veces verás que vengan a atenderme porque si me caigo y tienen que venir a por mí es porque me ha pasado algo de verdad. Quedaba la esperanza de fuese algo más leve, un esguince o una distensión. Esa noche lloré. Piensas que van a ser seis meses, que va a ser duro. Fue un palo muy grande». A raíz de la lesión, Rober ha recibido múltiples muestras de cariño por parte de compañeros, amigos, familiares y colegas del mundo del fútbol.

Regresará en pretemporada

En el día a día Jaume o Gayà, dos de sus grandes amigos en el vestuario, son los que más pendientes están. También otros como Medrán o Parejo se interesan a diario por sus evoluciones. Y desde la distancia, cómo no, su inseparable Juan Bernat. Todavía quedan unos meses de puesta a punto por delante pero todos quieren verle pronto sobre el césped.

«Suso me pregunta cada vez que lo veo e incluso Prandelli se acercaba a hablar conmigo a la camilla...», añade. Del Leganés prácticamente todos los días recibe alguna llamada. «Es increíble el cariño que recibo por parte de un club en el que solo he estado tres meses»... Desde los jugadores hasta la presidenta. «Al final eso hace que te tomes mejor la recuperación. Es muy importante que la recuperación sea aquí en València, con el apoyo de mi familia. Estoy en buenas manos y estoy en mi casa. Cada dos por tres tengo aquí a mis amigos, están viniendo a hacerme visitas ahora que apenas puedo salir de casa y eso me está viniendo muy bien», resume el futbolista, que sufre con sus dos equipos: «ojalá el Leganés se quede en Primera la próxima temporada y el Valencia se estabilice cuanto antes, pronto volveremos a estar donde merecemos». Su prioridad ahora es recuperarse al cien por cien para estar en la pretemporada. Hasta entonces le toca conformarse con la PlayStation...