A la hora de escoger al entrenador que deben proponer a Peter Lim, Mateu Alemany y José Ramón Alexanko valoran múltiples variables: Conocimiento de la Liga, trayectoria y rendimiento de sus equipos en una gran competición como la española, método, liderazgo y fidelidad en el interior de un vestuario, etc. En las últimas semanas, además, el director general, el director deportivo y Anil Murthy, futuro presidente, han tomado nota del crecimiento que ha experimentado el actual Valencia CF. De la mano de Voro, y pese a los altibajos, el equipo suma a la velocidad de quienes ahora compiten por hacerse sitio en Europa: Villarreal, Athletic, Eibar y Real Sociedad. E, incluso, por encima de los equipos que entrenan dos hombres que están en la agenda: el Celta de Eduardo Berizzo y Las Palmas de Quique Setién.

La mejora colectiva y en los rendimientos individuales de la plantilla es aval que ofrece la labor del cuerpo técnico de Voro después de tres meses y medio. El exjugador de l’Alcúdia se hizo cargo del Valencia por segunda vez esta temporada el día de Fin de Año. Cesare Prandelli había dimitido horas antes por discrepancias con el modelo deportivo del club, dejando al conjunto blanquinegro décimo séptimo, a 14 puntos de la zona Champions, 13 de la Liga Europa y empatado a 12 puntos, en puestos de descenso, con el Sporting de Gijón.

Los blanquinegros concluyeron el año liguero con el entrenador italiano cayendo en San Sebastián (3-2). A principios de enero Voro debutó por enésima vez en el banquillo en la Copa. El Celta amplió las heridas de un Valencia plagado de bajas, especialmente, en defensa. Los del ‘Toto’ Berizzo sentenciaron la eliminatoria con una goleada en Mestalla (1-4). Seis días después el Osasuna, colista de la Liga, empató al Valencia en los instantes finales del duelo en El Sadar (3-3). Hacerle goles al Valencia era coser y cantar y, como ha reconocido Voro recientemente, aquellos fueron los momentos más duros del curso.

Tres meses después el Valencia ha enviado los fantasmas del descenso y, nuevamente al Sporting, 17 puntos por detrás. Si bien es cierto que en su camino el equipo dejó escapar oportunidades -Eibar (0-4), Alavés (2-1) o Sporting (1-1)- para haber intentado un asalto a la zona de Europa League, el mérito de Voro radica en el hecho de revivir por dos veces a un grupo que estaba roto, superado por sus propios miedos y por una plantilla descompensada en su confección. Entre seis y ocho puntos más en los partidos mencionados o en algún otro como el del Benito Villamarín, donde el colegiado jugó en contra de los intereses blanquinegros, hubieran significado sumar al son de los mejores, mejor incluso que dos aspirantes a Champions como Sevilla y Villarreal. Es decir, la excelencia y la posibilidad de que el objetivo europeo estuviera aún vivo.

La normalidad en el ambiente y en los números -más acordes a lo que históricamente ha acostumbrado el Valencia CF- ha regresado con Voro González. La semana anterior el equipo encadenó frente a Deportivo, Celta y Granada tres victorias por primera vez en la temporada. A pesar de que han activado contactos con otros candidatos al banquillo, en la cúpula del club son conscientes de que el factor Voro y los 33 puntos sumados en 19 partidos -Ayestaran hizo cero en cuatro y Prandelli seis en ocho- deben tenerse en cuenta, sobre todo, si el ritmo se acrecienta en las siete jornadas que restan hasta el final.

A día de hoy, los de Voro ofrecen en la Liga un rendimiento superior al de los conjuntos de Setién o Berizzo, técnicos barajados por Alexanko y Alemany. Celta y Las Palmas han perdido fuelle en la segunda vuelta. En el caso de los celestes, que tienen un partido menos, la merma está condicionada por las rotaciones y la lucha por el título de la Liga Europa. De un modo u otro, la reacción con Voro es innegable, así como que con él se ha recuperado la fuerza en Mestalla, conquistando 16 de los últimos 18 puntos en liza. Los integrantes del cuerpo técnico saben que para ganar enteros la mejora debe consolidarse. Ahora, el próximo objetivo es Jorge Sampaoli y su Sevilla FC.