El Valencia CF Mestalla va ´cap amunt´. Está a 180 minutos de ascender a Segunda División y escribir una página de oro en la historia del club. Los de Curro Torres están a dos pasos de devolver al filial a la categoría de plata del fútbol español. Curro Torres Todo un éxito que todavía sabe mejor en medio de la decepción y en ocasiones ridículo que ha hecho el primer equipo en los últimos tiempos. Hay que remontarse 46 años atrás para encontrar el último ascenso a Segunda División. Sucedió en 1971 con Manolo Mestre en el banquillo, con 25.000 almas en las gradas de Mestalla y con gol (2-1) de Lis para el recuerdo.

Casi cincuenta años después la historia se repite con un Mestalla, el de Curro Torres, que ya ha conseguido algo casi tan grande como un ascenso: ser el orgullo de la afición. Los canteranos han dignificado el escudo y han demostrado el compromiso, la actitud y el respeto por los colores que la mayoría de jugadores del primer equipo no tuvieron. El Mestalla, al menos este año, es el equipo de la afición. El que ha enganchado a la grada y se ha ganado el corazón de la gente. Hoy ellos son el Valencia CF.

Alrededor de 25.000

Por eso el equipo esta tarde no estará solo. Al revés. El valencianismo se ha movilizado bajo el lema ´Llenemos Mestalla´ y se ha citado dos horas antes del partido en la Avenida de Suecia para recibir al autobús y, como decía Curro el miércoles, «dejarse el alma» por los chavales. Se lo merecen. La previsión del club es que asistan al viejo coliseo alrededor de 25.000 aficionados. Más de lo que el primer equipo fue capaz de reunir en varios partidos de Liga. Como contra el Málaga o frente a Osasuna. Eso ya es un triunfo. Aunque ni Curro ni sus jugadores se conforman con lo que han logrado hasta la fecha. Quieren más. El deseo de todos es poner la guinda a una temporada y un play-off brillante. El Celta B y el Real Murcia, dos candidatos al ascenso, ya han sufrido en primera persona al Mestalla.

La máquina de Curro

Normal que el Albacete no las tenga todas consigo. Hay respeto. Lo primero que dijeron los exvalencianistas del ´Alba´, Carlos Delgado y Pizana, a sus compañeros cuando se conoció el cruce fue: «Cuidado, que el Mestalla no es un filial». Tienen razón. Esta combinación de jóvenes y jugadores más experimentados ´made in´ Alexanko es una máquina que Curro ha convertido en perfecta. Al César lo que es del César. Es un bloque ultracompetitivo, maduro y, sobre todo, ganador. Así lo acreditan los números. Hasta la fecha van tres victorias y un empate, el de la Nueva Condomina, en el play-off. Eso son palabras mayores.Un bloque por encima de todo

Como empiezan a serlo también todos y cada uno de los nombres y apellidos de este grupo casi o sin casi convertido en familia. Curro tiene tres bajas importantes. Sito, Charlie y Ayala no llegan por lesión, pero no importa. O importa poco. La grandeza de este filial es que todos los jugadores que entran al once rinden como el que más. Juegue quien juegue la fuerza del Mestalla será el grupo. El filial por encima de todo es un equipo con mayúsculas. Compromiso e ideas claras son sus señas de identidad. «Hay que seguir siendo nosotros». Son las palabras más repetidas por Curro en las últimas horas. La consigna está clara. Hay que salir a ganar como siempre, jugar como se entrena y no traicionar a la personalidad, ambición y atrevimiento con la que llegaron a esta tercera y última eliminatoria de ascenso. Curro ha mentalizado a su plantilla para que dé el máximo y no regrese al vestuario al final del partido con la sensación de que podía haber hecho más. Nunca se lo perdonarían. Lo bueno es que nunca lo harán. Este equipo si algo tiene es hambre. Gane o pierda luchará hasta el final. Por eso emociona verlos jugar. Nadie en este equipo piensa en vacaciones. Podían llevar un mes perdidos en alguna isla del Caribe, Baleares o Bahamas, pero por sus cabezas solo pasa hacer un último esfuerzo y crecer al ritmo del equipo. Están disfrutando. Encima no tienen presión, la temporada ya es un éxito, pero el deseo de todos en el vestuario es ponerle el mejor broche posible al año. Se lo creen.

Como ellos mismos dicen son los «tapados». El premio del ascenso es grande. Devolverían al Valencia la grandeza que unos cuantos se empeñaron en arrebatarle, brindarían una alegría a la afición desencantada y falta de referentes, darían un salto de calidad en sus carreras deportivas a nivel individual y, cómo no, continuarían asomándose a la puerta del primer equipo. ¿Por qué no? Lo merecen mucho más que otros. Carlos Soler ya lo hizo. También Lato. Y no serán los últimos. Ellos ahora mismo son la vida de este Valencia. Mestalla les espera con los brazos abiertos. Son sus ´niños´. Los que no van a fallarles. Hoy más que nunca. Amunt, Mestalla!

Vuelve Javi Jiménez

La alineación titular variará poco a la de los últimos partidos. El equipo está hecho. Y tan hecho. Que se lo pregunten a Vicente Mir. Empezando desde atrás con el mejor portero de su edad de toda España, Antonio Sivera, y una defensa tan joven como fiable formada por Nacho Vidal, Lato, Zotko y la gran novedad: Javi Jiménez. El de Aldaia regresa al once inicial después de tres partidos fuera. El trivote es innegociable. Grego, Eugeni y sobre todo el capitán Quim Araujo volverán a ser determinantes en la sala de máquinas. Y más teniendo en cuenta que el Albacete se encuentra cómodo sin balón y no le importará esperar atrás.

Circular el balón rápido y encontrar espacios será fundamental. Arriba tampoco habrá cambios. Para qué tocar lo que tan bien funciona. Nacho Gil repetirá en la banda derecha, Rafa Mir se colgará el '9' como en toda la promoción y la única duda reside en el carril izquierdo. Sin Sito, tres son las alternativas que maneja el cuerpo técnico. Jordi Sánchez desplazando a Rafa a banda, Aridai desde el principio o la más probable: continuidad para Alberto Gil.