La dificultad aumenta en el segundo test de la pretemporada para el Valencia de Marcelino García Toral. Tras golear con una ´manita´ al modesto Lausanne, esta noche en Martigny (Suiza) los blanquinegros se enfrentarán al Sporting de Portugal, tercero de la liga lusa, con el objetivo de reforzar las buenas sensaciones del primer día frente a los suizos. «Para empezar estuvo muy bien, dimos la cara. Ganamos, que es lo importante, y dejando la portería a cero, que es lo que se nos va a inculcar este año. Hay que dejar la portería a cero el máximo de partidos posibles», advierte en una entrevista a la radio oficial del club Martín Montoya.

El lateral derecho da con la clave. La solidez defensiva es la esencia del Valencia que está tramando el nuevo entrenador y el núcleo duro de todas y cada una de las charlas tácticas que ha mantenido en este comienzo de aventura en el interior del vestuario. El reto es corregir desde el principio la inercia negativa de la pasada temporada, donde el equipo no logró acabar un partido imbatido hasta la jornada 19 de Liga, cuando se impuso al Villarreal 0-2 a finales de enero. «Estamos incidiendo en lo táctico, en que nuestra portería se mantenga a cero, es importantísimo. Por eso estamos trabajando mucho defensivamente. El año pasado no estuvimos acertados en la táctica. Defensas, medios, delanteros debemos ajustarlo todo y convertirnos en un equipo compacto y difícil de superar», relata Montoya, sabedor de que la sangría de goles en contra del curso anterior causó daños muy serios al Valencia CF.

Diferencias con Ayestaran

La pretemporada ha comenzado de manera positiva y distinta a la de hace un año con Pako Ayestaran al frente. Entonces, un tercera división de Alemania, el Preussen Münster, le hizo dos goles al Valencia en su estreno veraniego (2-4). Con el Feyenoord cayeron otros dos y uno contra el Ilves, un primera de Finlandia, antes del empate a uno con el Bournemouth o de la goleada sufrida (3-1) por los de Ayestaran contra el Crystal Palace. Como colofón a la pretemporada un combinado de la liga nigeriana también perforó la portería de un Valencia que ganó aquel partido 2-1, como a la ´Fiore´ en el Naranja.

Hoy en un atractivo duelo contra el Sporting de Portugal el Valencia de Marcelino puede conseguir algo que durante toda la campaña pasada únicamente sucedió en las jornadas 22 y 23 de Liga -frente a Betis y Athletic-, encadenar dos partidos sin recibir goles. A la conclusión del curso el equipo sólo dejó la meta a cero en siete ocasiones, todas ellas con Voro González como responsable del banquillo. Esta noche el equipo desea proseguir con la inercia del 0-5 al Lausanne, mostrar un Valencia difícil de batir, férreo, intenso, solidario y rápido y efectivo en sus ataques. En el seno del vestuario, según cuenta Montoya, hay fe absoluta en la labor de Marcelino y en su capacidad para virar el rumbo de las dos últimas temporadas: «La victoria contra el Lausanne fue importante. Sabemos que vamos a trabajar muy bien con el míster, tenemos claro a lo que vamos a jugar, las cosas están muy claras, y vamos a ser un grupo difícil de rebasar. Nos esforzamos para empezar la Liga fuertes y hacer un buen campeonato».

«¡Marcaremos abdominales!»

«Marcelino es un grandísimo entrenador que ha llevado a sus equipos arriba durante años. Un gran cuerpo técnico con las ideas claras faltaba en este club, estabilidad con un técnico que sabe cómo hacer las cosas. A partir de ahí, jugadores, afición, debemos ir todos a una para llevar al Valencia a los puestos de arriba», añade el lateral derecho. Una las normas que ha traído Marcelino consigo para lograr los objetivos marcados es la del control estricto en la alimentación. Montoya explica el régimen implantado contestando con buen humor a la pregunta del periodista. «Si estuvieras aquí adelgazarías cinco o diez kilos. Es algo totalmente diferente a lo del año pasado. Hay un nutricionista que lo ha cambiado todo. Comemos hidratos, proteínas, pero no se trata de comer por comer, la cantidad es poca, racionada... Por ejemplo, pasta, arroces, muchas cosas integrales y con verduras todo. Vamos a marcar hasta las abdominales, tienen estudiado lo que ingiere cada futbolista», dice sobre el exhaustivo control de la dieta por parte del cuerpo técnico.

Dentro del plan Marcelino, el de consolidar los conceptos y valores defensivos, frente al Sporting el sistema 4-4-2 permanecerá invariable. El técnico tiene en mente seguir dando oportunidad a todos, incluidos los jóvenes que tan bien lo hicieron ante el Lausanne o jugadores con un futuro incierto. Eso sí, el once inicial contará con más teóricos titulares que el del martes.