El Valencia ha rescindido unilateralmente el contrato de Michael Wayne ‘Mikey’ Fernández. El club se desvincula de esta forma del futbolista que tenía que incorporarse a los entrenamientos con el Valencia Mestalla el próximo lunes 17 de julio en la ciudad deportiva de Paterna.

El jugador, cedido por el club al Eldense la pasada temporada, está presuntamente implicado en el escándalo del amaño de partidos. La Policía le ha retirado el pasaporte y no podrá salir de España rumbo a una liga menor. ¿Lo querrá algún club de Segunda División B o tendrá que conformarse con seguir jugando en un Tercera? El futbolista ya busca equipo.

Maiki engañó al mundo del fútbol con sus lágrimas en los ojos a la finalización de la goleada (12-0) del Barcelona B contra el Eldense en el Mini Estadi. «Quiero pedir disculpas a los aficionados. Hoy ha sido el día más duro de mi carrera, he sentido mucha impotencia». La Policía, lejos de creerle, investigó hasta destapar la trama.

Cheikh Saad, su compañero que denunció el fraude, ya dijo que «algunos de los que lloran en la televisión son los que amañaron el partido». La Policía detuvo al futbolista, así como también al resto de investigados, que pasó la noche en calabozos y declaró en la comisaría de Elda en Alicante. Mikey, interrogado por el juez, está en libertad con cargos desde el pasado abril.

El primer responsable del Valencia CF que no se cortó a la hora de enseñarle la puerta a Mikey fue Voro. Preguntado por si debería de ser expulsado del club el entonces técnico del equipo afirmó que «la Policía y el juez tienen que investigar y dictar un veredicto, pero hay que apartar a estas personas del fútbol, es un hecho que por desgracia estamos viendo, entre todos hay que poner remedios para que esto no suceda. Esto es feísimo para el fútbol, pero primero hay que aclarar los hechos y el que la ha hecho que la pague», reconocía en rueda de prensa.

Una decepción deportiva

La dirección deportiva de la escuela tenía muchas esperanzas depositadas en Maiki hace años. De hecho, fue uno de los canteranos más destacados en el Juvenil de División de Honor que dirigía Rubén Baraja. Manejaba al equipo desde la posición de ‘8’. A pesar de no cuajar en el Mestalla, el club lo cedió primero al Guijuelo y a continuación al Eldense en busca de los minutos que no tenía en el Valencia.

Lejos de encontrar esa madurez deportiva necesaria para volver al filial Mikey se involucraba en el presunto escándalo de amaño de partidos y decía adiós a cualquier opción de triunfar, al menos en el Valencia CF.