El futbolista del Valencia CF, Gonçalo Guedes,ha puesto la directa en su proceso de recuperación. El portugués inició el martes en la Ciudad Deportiva de Paterna la última fase de su puesta a punto. Por primera vez desde que fue operado por una fisura en el quinto metatarsiano del pie izquierdo el portugués trabajó junto al resto de sus compañeros. La cuenta atrás ya está en marcha y aunque su regreso no es inminente, todo va por buen camino. SUPER publicó el lunes declaraciones del Antonio Maestro, el doctor que lo intervino el 27 de noviembre en el Hospital Begoña de Gijón. «La recuperación es muy buena», explicaba el galeno, que está en permanente contacto con los servicios médicos del Valencia y, por lo tanto, al tanto de todas las evoluciones del portugués. SUPER Antonio MaestroHospital Begoña de Gijón

El jugador, que salió al césped por primera vez el sábado, se puso el martes a las órdenes de Marcelino. Avanza a buen ritmo. «Poco a poco», pero las sensaciones son muy positivas, al punto que ayer se le pudo ver golpear el balón con el pie del que fue intervenido. Ha superado con éxito la primera etapa de la recuperación y ahora se tiene que producir la curación biológica, o en otras palabras: tiene que solidificar el hueso para poder volver.

El portugués salió al terreno de juego del campo número cinco de Paterna y realizó con normalidad buena parte del entrenamientoPaterna . No lo finalizó, como tampoco Garay, que también regresaba con el grupo tras una lesión en la musculatura oblicua del abdomen sufrida ante el Barcelona y que le ha hecho perderse los partidos ante Real Zaragoza, Getafe y Celta de Vigo. El argentino tiene sensaciones cada vez más positivas y todo indica que estará preparado para regresar ante el Eibar, si bien depende de cómo evolucione durante el resto de la semana. Volviendo a Guedes, en el club analizan con máxima cautela su presencia en el entrenamiento del martes.

El plan es que vaya integrándose y aumentando las cargas de trabajo para ver cómo reacciona. La idea de los médicos en un principio era que estuviera para el primer partido de 2018. Ahora, nadie se atreve a descartarlo para el encuentro del próximo día 23 ante el Villarreal, que cae entre la tercera y cuarta semana de su recuperación. En un principio el jugador no llegaría de ningún modo a Ipurua para jugar contra el Eibar. El staff técnico es consciente de que no debe correr riesgos con el jugador porque su lesión podría empeorar y podría estar más tiempo de baja.

Avanza a buen ritmo

Hasta ahora todo va como un tiro. El 26 de noviembre jugó ante el Barça con la fisura en el quinto metatarsiano, al día siguiente fue operado en Gijón, donde se le colocó un tornillo de fijación en el pie. El día 28 por la noche regresaba a València y el día 29 a primera hora de la mañana reaparecía en las instalaciones de Paterna para mantener una primera conversación con los miembros de los servicios médicos del club. Lo hacía en muletas, con una férula y acompañado por su novia Madalena y sus amigos Joao, Ines y Francisco. El pasado día 9 se calzaba las botas por primera vez y salía a la jaula de Paterna para testar sus sensaciones tras varios días trabajando con los fisioterapeutas y realizando trabajo en el interior del gimnasio. Ayer, día 12, sorprendía a todos trabajando con el grupo.

Está un paso más cerca. Tan solo han pasado quince días desde que pasó por el quirófano pero Guedes ya ha iniciado la cuenta atrás. Quiere volver a disfrutar jugando al fútbol. Entre ceja y ceja se ha marcado el objetivo de reaparecer ante el Villarreal. Su evolución será la que marque los plazos. El martes todavía no participó en el partido reducido que llevó a cabo el equipo en el entrenamiento, se retiró antes y estuvo tratándose en la camilla. Los médicos calculan que ahora le esperan entre siete y diez días trabajando para que su pie ofrezca plenas garantías y no se agrave su problema.