Rubén Baraja será el nuevo entrenador del Sporting de Gijón después de que el club asturiano despidiera a Paco Herrera. El exjugador valencianista pasará por su tercer banquillo en Segunda División después de que el club asturiano lo hiciera oficial ayer. En la misma tarde fue su presentación y también dirigió su primera sesión de entrenamientos. Firma por esta y otra temporada.

En su presentación, Baraja aseguró sentirse muy contento e ilusionado por su nuevo proyecto. «Es una gran alegría y una gran ilusión estar aquí. El Sporting tiene que aspirar a todo. Tenemos la responsabilidad de poner al club con los mejores». Además, añadió también respecto a las opiniones negativas de algunos aficionados por su contratación que «yo soy el que tengo que cambiar, con resultados y juego, aquellas opiniones contrarias a mí. Asumo y acepto la exigencia de resultados porque sabemos lo que significa este club y las aspiraciones que tiene. Sencillo no es, pero tenemos la ilusión y el entusiasmo para lograr los objetivos». Baraja se enfrentará al reto que supone devolver al Sporting a la Primera División. El club creó un proyecto a principio de temporada para ascender de forma directa. Los rojiblancos comenzaron bien la temporada e incluso se pusieron líderes de la competición, pero en las últimas semanas ha ganado un partido de nueve, situándose décimo con 24 puntos y a nueve puntos del ascenso directo y a cinco de la promoción.

Los resultados negativos han llevado a la directiva a prescindir de Paco Herrera y contratar a uno de los mitos del valencianismo. Baraja comenzó su carrera en los banquillos como tercer ayudante técnico de Gregorio Manzano en el Atlético de Madrid en el año 2011. Cuando el técnico fue destituido por Diego Simeone, Baraja abandonó también el club rojiblanco. Su camino como entrenador iría entonces por el de la formación. En diciembre de 2012, el Huracán Valencia incorporó al vallisoletano al cuerpo técnico del juvenil del División de Honor. Pero su primer equipo como entrenador fue el Juvenil ‘A’ del Valencia CF. En verano de 2013 comenzó su trayectoria e incluso dirigió como técnico interino al Valencia Mestalla.

Fueron dos años hasta que acabó en verano de 2015 y entonces dio el salto al fútbol profesional de la mano del Elche. Baraja se hizo cargo del club en Segunda División tras su descenso administrativo y completó la temporada acabando decimoprimero. El Elche le ofreció la renovación, pero el técnico no la aceptó porque no creía en el proyecto. «Para estar en un proyecto deportivo debes creer al cien por cien en él y esto no lo siento» declaró después. El Rayo Vallecano fue su segundo equipo como técnico en la temporada siguiente. Llegó sustituyendo a José Ramón Sandoval pero no consiguió los resultados deseados y fue despedido después de no conseguir los resultados esperados y estar alejado de los objetivos del club. Baraja ya ha rechazado dos ofertas de la misma categoría esta misma temporada, pero las negociaciones con el Sporting llegaron ayer a buen puerto. Ahora será el conjunto gijonés quien esté a las órdenes del ‘Pipo’ en su intento por volver a la máxima categoría. De hecho, hasta su máximo rival, el Oviedo, está por delante con cinco puntos de ventaja después de estar ocho por detrás. Una situación que hacía mucho tiempo que no se vivía y que caldea los ánimos de los aficionados.

Cuando llegó a Mareo, un aficionado le dijo «mira a ver si levantas esto». Y es que la papeleta es complicada. Hubo gran expectación en la ciudad deportiva del Sporting de Gijón. Gran cantidad de aficionados se acercaron para presenciar el primer entrenamiento con el técnico de Valladolid. Baraja tendrá ante sí un reto difícil: cambiar los resultados de forma inmediata con casi media liga jugada y una afición cansada de los malos resultados y de la situación que vive el equipo. Su debut será este domingo en El Molinón a las 18:00 frente al Tenerife. Curiosamente, una leyenda del Valencia dirigirá al Sporting mientras otra persona muy querida en Gijón como es Marcelino García Toral es el actual técnico del Valencia. Afición desencantada Al inicio de la temporada, la afición del Sporting batía registros de asistencia en Segunda, con una media de más de 22.000 espectadores que le situaban en el ‘top 100’ en Europa en cuanto a asistencia. La mala racha del equipo hizo que frente al Zaragoza, en la última jornada liguera, fueran menos de 16.000 personas. Faltaron más de 8.000 abonados en un partido entre dos equipos históricos del fútbol español.