El Valencia CF sumó en Ipurua una nueva lesión al historial de bajas de las últimas semanas. José Luis Gayà se retiró en el descanso por unas molestias musculares en los músculos isquiotibiales de la pierna izquierda. El lateral zurdo, que lleva siete meses (desde el pasado mes de abril) sin una lesión, fue sustituido por Toni Lato en el minuto 46, será sometido el lunes a pruebas médicas para conocer el alcance exacto de las dolencias que le obligaron a dejar a mitad el Eibar-Valencia. Instantes antes del comienzo de la segunda mitad, las cámaras de televisión captaron como Santi Mina comentaba con un jugador del Eibar el motivo de por qué Gayà se había quedado en el vestuario al descanso, una pequeña molestia en los isquiotibiales.

El Valencia, finalizado el partido, informó que el zurdo no llegó a sufrir un pinchazo, sino unas molestias en el bíceps femoral -músculo de los isquios- de la pierna izquierda. El futbolista notó dolor en la zona, las sensaciones fueron incómodas y en el descanso médicos, técnicos y el implicado decidieron parar y no correr más riesgos que pudieran exponer a Gayà a una lesión o una rotura muscular de gravedad. Marcelino García Toral se refirió tras el partido a la lesión de un jugador que lleva tiempo sin padecer percances serios en lo físico. «Gayà tiene un problema en el isquio, los doctores valorarán la importancia que tiene en los próximos días. No creo que sea muy grave», apuntó el entrenador del Valencia en la rueda de prensa.