José Mourinho está muy pendiente de Andreas Pereira. El manager del Manchester United, que anunció a los cuatro vientos que el club británico tiene una cláusula mediante la que podría romper la cesión del futbolista al Valencia y recuperarlo en el mercado invernal, marca muy de cerca al extremo brasileño. Ve todos sus partidos, analiza todos sus movimientos de forma detallada e incluso le manda mensajes de texto desde su teléfono móvil, algo que ocurre habitualmente antes de los partidos importantes. Mou lo ata muy en corto: quiere tenerlo recogido y controlado pese a los más de 1.500 kilómetros que median entre València y Manchester. ¿Por qué? La respuesta es clara, tiene grandes planes para él. La cuestión es si esos planes son a medio plazo o pensando en una incorporación inmediata. Y es que ese es un asunto candente en Inglaterra, donde cada semana surgen especulaciones periodísticas en torno a un posible retorno del jugador a Old Trafford.

Distintos tabloides y algunos de los pundits más reconocidos del panorama señalan que su incorporación podría sería crucial de cara a la segunda mitad de temporada, vistos los problemas que ha acusado el United en la medular. Mourinho se ha visto corto de efectivos con las lesiones de Fellaini, Pogba, Carrick, Matic o Mkhitaryan; el nivel de Ander Herrera no ha estado a la altura de la anterior temporada y a Mata lo considera casi como un hombre de ataque. La realidad que subyace, en cualquier caso, es bastante diáfana... Mientras no se demuestre lo contrario. Hasta hace unos días el Valencia no había recibido ninguna llamada en nombre del United. «Su futuro está en manos del Manchester y del propio futbolista, nuestra obligación es estar preparados pero no tengo noticias y no tener noticias en este caso es una buena noticia», expresó Mateu Alemany en una comparecencia de prensa en la que tocó prácticamente todas las aristas de la actualidad del club.

No existe un contacto oficial entre clubes ni lo ha habido en los últimos meses pero en el Valencia no descartan todavía ningún escenario. Y es que el club no tiene la sartén por el mango en este tema. Si dependiese exclusivamente del futbolista, no habría absolutamente nada que hablar. Su intención es quedarse en Mestalla hasta final de temporada para seguir creciendo a las órdenes de Marcelino. «Yo quiero estar aquí y ayudar al Valencia hasta junio», confesó Andreas en una entrevista concedida a SUPER, «es el pensamiento con el que vine, sé que tengo esta cláusula en el contrato de cesión y ahora tengo que esperar para ver. Pero mi mente está focalizada en el Valencia CF y quiero quedarme aquí».

El jugador, que ha marcado un gol y ha dejado cuatro asistencias como valencianista, es uno de los primeros jugadores en la rotación, está ganando peso específico en la plantilla y en las últimas semanas ha intentado aprovechar su oportunidad ante la ausencia de Guedes primero y de Carlos Soler después. El brasileño -aunque nacido en Duffel, Bélgica- es plenamente consciente de que sus probabilidades de ser protagonista en el Valencia son considerablemente mayores que en Old Trafford y eso -minutos de participación- es lo que su progresión demanda ahora. Marcelino confía en él, está cómodo y se ha integrado en un vestuario en el que ha mezclado a la perfección con jugadores que lo han arropado como Neto, Vezo, Paulista, Rodrigo o Guedes.

Hasta el 30 de junio

No quiere saber nada del Manchester —descontando los consejos de Mou— hasta el 30 de junio. En verano tomó una decisión atrevida, salir cedido en busca de minutos que favorecieran su desarrollo, algo que no sentó nada bien al técnico, partidario de que luchara por un puesto en los Red Devils. «Fue una decisión personal suya con la que no estoy de acuerdo, una decisión que honestamente creo que no es la mejor, una decisión que me decepciona. Tiene potencial para luchar por un puesto en el equipo y para tener oportunidades como futbolista del United», dijo el portugués. Ayer se levantó la persiana del mercado de fichajes y con ella arranca el plazo del United para reclutarlo. Andreas está convencido de que se quedará... Salvo que un WhatsApp de Mourinho indique lo contrario.