Marcelino García Toral ya está de vuelta en València. El técnico asturiano ha aterrizado en el aeropuerto de Manises minutos antes de las nueve de la mañana de este miércoles acompañado por su agente, Eugenio Botas, en un vuelo procedente de Oviedo. Lo hacía en collarín para recuperarse del esguince cervical y todavía convaleciente del fortísimo accidente de tráfico que sufrió hace unos días de camino a casa para celebrar las fiestas junto a su familia, pero sonriente y agradecido por las incontables muestras apoyo recibidas por parte del valencianismo en los últimos días.

SUPER ha recibido al entrenador del Valencia en Manises, donde resolvió la pregunta de cómo se encuentra con un "tirando" y ha añadido que él "también se alegra de encontrarse bien". Nada más poner un pie en la terminal los aficionados se han interesado por su estado de salud tras chocar el pasado día 24 contra un jabalí en el kilómetro 125 de la autopista AP-68 a su paso por Logroño. "Míster, queremos que te mejores", le decía uno. Otro le preguntaba por su madre, que todavía se encuentra hospitalizada. El técnico, al que le pidieron fotos hasta en el interior del avión, atendió a todos los valencianistas que le salieron al paso.

Afortunadamente, no hay que lamentar nada grave pero el susto ha sido tremendo. Cada día que pasa se encuentra mejor y una vez superado este suceso ha llegado el momento de volver a poner el foco en el fútbol. A la llegada a València le esperaba Voro, ayudante de la dirección general, que lo ha llevado hasta su casa. Marcelino ya está de vuelta. No podrá viajar a Las Palmas hoy con el equipo para el partido de octavos de la Copa del Rey pero avanza en su recuperación y pronto estará listo para tomar de nuevo las riendas del Valencia. Eso sí, el técnico ha pasado por la ciudad deportiva de Valencia para saludar a los futbolistas que viajaban hacia Canarias para disputar el partido.