El Athletic presume de filosofía única... con motivos. Yeray Álvarez, Unai Nuñez e Iñigo Córdoba -por citar a los tres últimos cachorros que han llegado al primer equipo- justifican cualquier lema luminoso sobre su modelo. Sin embargo, dentro del fútbol vasco existe la sensación de que no todo es tan puro e idílico como se proclama. Cuando Lezama no alcanza, emerge el poder económico del transatlántico futbolísitico de Euskadi. Su red de captación arranca en Bizkaia y se extiende por Gipuzkoa, Araba, Navarra, La Rioja y el País Vasco francés. Los leones intentan imponer su dominio sobre el territorio de Real Sociedad, Alavés, Osasuna o Eibar. No sólo eso, también muerden sobre sus canteras y amenazan como gran depredador. Iñigo Martínez es el último ejemploIñigo Martínez .

El Manchester City se lleva a Aymeric Laportepor 65 millones de euros y el ataque es directo: el Athletic paga la cláusula de Iñigo, 32 millones de euros. El pez grande siempre hace sufrir al pez más pequeño. Depredación pura. El problema es que el movimiento va más allá del negocio y el mercado, restringido al máximo para los rojiblancos. El cambio es alta traición; algo así como saltar del Bestis al Sevilla, del Atlético al Real Madrid, del Everton al Liverpool... Duele por las formas y por el fondo, sobre todo; porque refuerza la supremacía centrista dentro de una rivalidad deportiva que se supone entre dos equipos grandes, entre dos instituciones iguales.

La irregularidad de la Real en LaLiga y la reciente eliminación en Europa League -gran apuesta de la temporada- han dejado a los donostiarras KOReal Europa League . La proclama oficial se está esforzando por devolver a la vida el objetivo de alcanzar plaza en la Europa League. La crisis tiene muchas caras y la única certeza es Zubieta. Por eso, Eusebio ha proclamado su intención de continuar al frente de un proyecto con un atractivo tremendo: "Creo mucho en todo lo que hemos hecho en este tiempo. Este trabajo no ha sido en vano. Estamos consiguiendo una línea clara y unos condicionantes muy alineados con lo que es la Real. Hemos hecho un cambio generacional importante. Estamos asentando las bases con una idea cara de juego!.

Desde noviembre de 2015, Eusebio ha lanzado a Álvaro Odriozola, Igor Zubeldia, Jon Bautista, Andoni Gorosabel, Jon Guridi y Kévin Rodrigues. La apuesta tiene valor doble y ha tenido resultados, aunque los desequilibrios entre defensa y ataque estén diluyendo las virtudes originales.

Loren y el salto de calidad

Iñigo es el jugador número trece que salta de la Real Sociedad al Athletic. Lo ha conseguido, por fin, tras intentar seducir a Griezmann o Illarramendi. El caso más dolorso desde Joseba Etxeberria. Otro clausulazo, el cuarto tras David Billabona y Loren Juarros, actual director deportivo de los txuri urdin, que en 1989 puso rumbo a San Mamés. La cantidad fue la más alta (cinco millones de euros) jamás pagada por un jugador nacional y deterioró las relaciones entre clubes. Además, provocó que la Real rompiera su política de jugar con sólo futbolistas vascos. Su recambio fue el irlandés John Aldridge. Marcó un antes y un después. Precisamente, Loren está en el foco. No se discute el papel de Zubieta y sí los jugadores que llegan desde fuera para producir un salto de calidad que no llega.

El Athletic es Bizakaia, pero no es Gipuzkoa, no es toda Euskadi... La Real trabaja para que la batalla por portar la bandera del fútbol vasco en el terreno de juego, con Zubieta como gran baza y jugadores nacidos en Coín, Madrid, Bruselas, México, Santa Coloma de Gramanet o Porto Calvo. La marcha de Iñigo al Athletic ha tenido impacto deportivo y emocional. La Real ha perdido a su mejor central y a un futbolista que se suponía líder de presente y futuro.

El aficionado acepta que sus jugadores se marchen a Barça, Real Madrid o Atlético, pero duele cuando se presentan en el Athletic y proclaman que el cambio se debe a motivos deportivos (proyecto más grande)... cuando -en realidad- son exclusivamente económicos. Iñigo se marchó lanzando un discurso duro: habló de falta de ambición. La derrota de Salzburgo ha abierto un poco más la herida y las dudas. Salzburgo