Partidos de Europa League, de selecciones absolutas, de categorías inferiores, de la liga francesa, de la liga alemana... Desde un tiempo a esta parte el Valencia CF tiene ojos en casi todas partes. Los últimos pasos de la secretaría técnica han puesto de manifiesto la voluntad de volver a extender una red de primer nivel pensando en reforzar el tejido competitivo de la plantilla con vistas al presente y al futuro.

La nueva dirección trazada por Pablo Longoria destila conocimiento del mercado y hambre por trabajar. El responsable del área técnica ya perfila un boceto de plantilla para el regreso a la Champions, despliega en Paterna un modelo para modernizar el concepto de cantera al estilo de los clubes que marcan la tendencia con el objetivo reforzar la salud deportiva y económica de la entidad a través de sus categorías inferiores y trabaja a destajo con el objetivo marcado de adelantarse al resto de equipos en la captación de jóvenes talentos, una de sus especialidades.

Longoria trabaja el futuro. Durante la mañana de este miércoles, sin ir más lejos, mantuvo una reunión por un futbolista en su despacho. Se trata de Boubakary Soumaré, prometedor centrocampista internacional Sub-19 con Francia que comienza a abrirse camino en el Lille y que está en la agenda de clubes como el Manchester City. El club del norte de Francia encontró en Soumaré el pasado verano una oportunidad de mercado en una batida general por todo el talento joven de diferentes canteras del fútbol francés y decidió apostar por él sacándolo del filial del PSG.

Su agente, Jonathan Kebe, llegó a Paterna a media mañana. Longoria lo recibió, ambos mantuvieron una reunión y después aprovechó para enseñarle los rincones de la Ciudad Deportiva. Soumaré es un jugador controlado, en su etapa al frente de la captación de la Juventus se dedicaba a analizar este tipo de futbolistas -ha llegado con la mochila llena de informes de jugadores jóvenes- y el Valencia CF le ha hecho un seguimiento específico en el contexto de la Ronda Élite disputada en las últimas semanas en Benidorm, donde jugó los tres partidos que le valieron a su país la clasificación para el Europeo ante Bélgica, Bulgaria y España. Allí lo vieron en directo al menos dos técnicos como Salva Grau y Jorge López.

La reunión con su agente supone un paso más y llega en el momento indicado, antes de que siga jugando en el campeonato francés -lleva solo 15 partidos en la élite- y aumente su cotización participando en la Eurocopa Sub-19 primero y quizá en el Mundial Sub-20 después. El movimiento es claro: anticiparse antes de que explote. Esa máxima va más allá de Soumaré pero su caso resume como metáfora el nuevo modus operandi que trae Longoria bajo el brazo.

En esa línea, durante la última ventana internacional, otro miembro de la secretaría técnica como Domingo Catoira, viajó a Suiza. El 26 de marzo estuvo en Ginebra y vio el Portugal-Holanda, un partido de mucho nivel. Y al día siguiente vio en Neuchatel el Suiza-Portugal Sub-21, donde hay jugadores interesantes como el lateral del Oporto Diogo Dalot, entre otros activos del equipo luso del último Mundial Sub-20, y algunos de los máximos exponentes del fútbol suizo, un mercado que asegura potencial a buen precio, trabajado por equipos alemanes, ingleses o italianos y poco frecuentado por españoles. El Valencia CF hace agenda en los grandes viveros.