Neto vive un momento dulce. Su trayectoria en el Valencia CF está colmando las expectativas de aquel momento en el que decidió dar el paso y salir de la Juventus. Cansado de vivir a la sombra de Buffon, el brasileño hizo una apuesta fuerte por ser actor principal. Marcelino le ha dado la titularidad, ha sido papá de una niña y el equipo, impulsado por actuaciones como la que tuvo ante el Espanyol, está a las puertas de materializar su regreso a la primera línea del fútbol europeo. "Entrar en Champions sería la realización de lo que quería para mí este año", expresaba el domingo tras contener todas las acometidas del rival con siete paradas que lo convirtieron en el ‘MVP’ del partido según la casa de estadísticas Whoscored.

Los técnicos están muy satisfechos con la explosión de Neto y eso es algo que va más allá de los números. La portería era una de las posiciones clave del plan de Marcelino para rearmar el equipo. Fue, de hecho, el primer fichaje de todos y se acometió mucho antes que el resto. Incluso, se hizo antes de que saliera Diego Alves, en un contexto en el que el Valencia CF no tenía apenas dinero ni ofertas para sacar jugadores, unos días después de que Mateu Alemany ‘regalara’ a Enzo Pérez al River Plate con tal de soltar lastre. Una vez trazado el perfil era clave anticiparse y acertar: los grandes responsables de la parcela deportiva consideraron que la elección del portero podía jugar una influencia decisiva en las probabilidades de éxito del proyecto.

Marcelino quería un guardameta completo y de centímetros que transmitiera seguridad, con capacidad para manejarse bajo palos y que reforzara la competencia interna. El asturiano utilizó sus contactos de confianza en el mercado para tener toda la información posible y comparar las diferentes alternativas que ofrecía. Habló con mucha gente antes de decidirse por Neto y una de las personas con las que contactó fue Pablo Longoria. El actual responsable del área técnica del Valencia CF desempeñaba entonces su cargo de jefe de ojeadores de la Juventus.

Ambos se conocían de hacía tiempo, coincidieron en anteriores etapas como el Recreativo de Huelva y hablan el mismo idioma, algo que ha sido fundamental a posteriori para su incorporación. Longoria, además de aportar conocimiento y contactos, ha mamado de Marcelino y eso se traduce en que cuando ve el fútbol interpreta a la perfección qué tipo de futbolista encaja porque proyecta de forma natural cómo podría funcionar en un contexto ‘marceliniano’. El técnico siempre ha tenido en alta consideración sus consejos a lo largo de su carrera y en este caso, además de todo lo anterior, se daba la circunstancia de que Neto jugaba en la Juventus, con lo que tenía informes suyos de primerísima mano.

La Juve lo iba a vender

El futbolista había tomado la decisión salir y la Juventus, adonde había llegado previamente a coste cero tras agotar su contrato con la Fiorentina, cedió a su petición de abrirle las puertas siempre que hubiera un equipo que pagara en torno a 7 millones de euros por sus servicios. El meta había cumplido su papel y con él bajo palos el equipo había sido campeón en dos ediciones de la Coppa. Había clubes de la Premier que andaban tras su pista, iba a salir y cuando Marcelino preguntó a Longoria este no tuvo dudas: «este es tu portero». No se equivocaba. Nueve meses después Neto ha conquistado el corazón de Mestalla y es uno de los argumentos más sólidos de la marcha del Valencia CF. El primer ‘fichaje’ de Longoria fue todo un acierto.