Dicen las autoras del libro ´La belleza del siglo. Los cánones femeninos en el siglo XX´ (Ed. Gustavo Gili, 2006) que las máscaras de pestañas en tonos vibrantes fueron los paños fríos de la fiebre del loft. "Son los últimos días de la música disco y la juventud dorada. Bajo las bolas reflectantes, las heroínas se maquillan para la escena: los labios son extremadamente rojos, los ojos están ribeteados de azul eléctrico y los pómulos destacan con un colorete color ladrillo. Se descubre el brillo y luego los tonos irisados e incluso metalizados.