Ser feliz no significa necesariamente ser una persona positiva. Sin embargo, para alcanzar la felicidad plena es clave la positividad. El ser humano tiene la capacidad suficiente para fijar formas de pensar que sean positivas y que le permitan alcanzar el éxito profesional y personal. Para lograrlas y conseguir que formen parte de nuestro día a día, solo hay que seguir los consejos que te planteamos a continuación.

Practica algún ejercicio. Con el deporte liberamos endorfinas, una ´droga´ natural que genera nuestro organismo y que nos hace ser más felices. Las endorfinas son hormonas que generamos cuando hacemos ejercicio y que actúan como neurotransmisores de placer. La sensación que transmiten es similar a la de la morfina, el opio o la heroína, pero sin sus efectos negativos.

Sé optimista. El optimismo mejora la autoestima, el sentido general de bienestar y la relación con otras personas. Evita las perspectivas pesimistas, no sirven de nada y pueden llevarte a fracasar en tus proyectos. Visualiza los éxitos, no los fracasos.

Desayuna siempre. Es la comida más importante del día. Algunos lo evitan para no engordar o porque no tienen tiempo. Desayunar nos aporta la energía suficiente para afrontar con fuerza el día y está demostrado que ayuda a encarar con éxito los proyectos. Un buen desayuno es, además, sinónimo de estilo de vida saludable

Defiende tus ideas. Sé asertivo. Di lo que piensas, respetando siempre al otro. Expresa tus opiniones con firmeza y si no estás de acuerdo con algo no te calles, de lo contrario favorecemos la generación de tristeza y pérdida de autoestima. Comunica tus deseos y pensamientos de forma sincera.

Compra experiencias, no cosas. Uno no es más feliz por tener más ropa, zapatos o un nuevo móvil. Gástate el dinero en emociones, en nuevas experiencias que desconocías. Invierte en diversión: viajes; y en conocimiento: estudia un nuevo idioma o aprende a tocar algún instrumento.

Agradece lo bueno que tienes en tu vida. Piensa en las cosas buenas que te han pasado. Haz una lista de todo aquello que tienes y que te hace feliz, como tu familia, tus amigos? Con ello enfocarás tu vida hacia los aspectos positivos.

Escucha música. La música adecuada transmite positividad. Escucha ese disco o esa canción que te trae gratos recuerdos. La música es alegría y diversión, en la mayoría de los casos.

Enfréntate a tus retos. Retrasar algo que tienes que hacer lo único que te va a generar es ansiedad y preocupación. Haz planes de futuro, confiando en que todos tus proyectos van a salir adelante. No temas ser innovador.

Evita los ambientes negativos. En el seno familiar y laboral se pueden generar malos ambientes que es mejor dejar de lado. Cuando esto pase, saca tu lado positivo e intenta transmitírselo al resto. Tampoco es bueno rodearse de gente de la que fluye negatividad.

Actúa con honradez y amabilidad. Responsabilízate de tus actos. No mientas, no hagas trampas y mantén tus promesas. Si cometes un error no escondas el bulto, admítelo.