El Ayuntamiento de Alicante ha llegado a un acuerdo para traspasar sus acciones del Baloncesto Lucentum -conocido como Meridiano-, entidad de la que tenía la mayoría de los títulos, y los compradores han asegurado la continuidad del equipo en la ACB.

Los empresarios alicantinos Luis Castillo y Juan Antonio Iniesta, junto con otros inversores, tienen a partir de ahora el paquete mayoritario de títulos del Lucentum, en cuyo consejo de administración entrarán a formar parte a partir de ahora.

Castillo, quien ya presidiera el Meridiano entre 2001 y 2007, vuelve a ser el máximo dirigente de la entidad lucentina, mientras que Iniesta pasará a ser el consejero delegado.

Hoy dimitieron de sus cargos de presidente y vicepresidente de la entidad, respectivamente, Miguel Cano y María José Paton. Mientras que también abandonaron el consejo de administración Enrique Peláez, Sonia Alegría y José María Rodríguez Galant.

Los nuevos máximos accionistas de la entidad deportiva asumen la deuda de alrededor de 3,6 millones de euros del Lucentum y Luis Castillo aseveró que el Lucentum estará inscrito para participar en la ACB el próximo 14 de julio.

"La situación era y es complicada pero lo importante es que el día 14 se acaba el plazo para inscribir al equipo en la ACB y el equipo estará inscrito", manifestó el nuevo presidente, quien se congratuló de evitar la desaparición de la entidad.

"Hace unos días hablábamos de una posible disolución del club y hoy, de poder continuar", declaró y añadió que el objetivo deportivo será "seguir en la ACB" todas las temporadas posibles, pero "siempre y cuando no se ponga en peligro la desaparición del club".

En este sentido, explicó que el presupuesto del Meridiano la próxima temporada será de alrededor de 3,7 millones, la cantidad mínima permitida por la ACB para formar parte de la competición.

El Lucentum -del que el Ayuntamiento mantendrá un diez por ciento de las acciones- instará próximamente un concurso de acreedores para afrontar su delicada situación económica y se ha comprometido a hacer frente al pago de las deudas con personal técnico y de oficinas de manera prioritaria.