La ciudad de Reading, situada a medio camino entre Londres y Oxford, anda estos días algo alborotada. La culpa la tiene uno de los equipos de baloncesto de la academia ubicada en esta localidad, la Reading Rockets. Concretamente el júnior femenino, que por primera vez en su historia disputará la final de la Copa de Inglaterra. Un éxito en el que ha tenido mucha parte de culpa el impulso valenciano presente en el equipo.

No en vano tanto el entrenador del equipo, Blai Benlloch, como su asistente, Joan Portero, son valencianos. Pero no sólo eso, también dos de las jugadoras con mayor peso específico en la plantilla, Paula Romero y Carmen Segura. La segunda, además, fue la máxima anotadora en las semifinales ante el COLA -City of London Academy- donde las Reading Rockets protagonizaron una de las grandes sorpresas del torneo.

La de Godella, jugadora taronja en L'Alqueria del Basket la pasada temporada junto a sus cinco hermanos, confesó que en Inglaterra «ven el baloncesto valenciano a un nivel superior en cuanto a calidad y táctica, e intentan enriquecerse». Algo en lo que coincide con Paula Romero, capitana del equipo. «Aquí el baloncesto es mucho más físico, pero el apartado táctico es su mayor debilidad», confesó la de Cheste.

En la final les espera este domingo el Leicester,uno de los mejores clubes de Inglaterra. «Estoy convencido de que podemos volver a dar la sorpresa. Somos un equipo con mucho ritmo e intensidad defensiva y si logramos imponer nuestro juego será complicado que nos ganen», aseguró Blai Benlloch. El técnico de Benaguacil hace ya cuatro años que emprendió esta 'aventura' y es el principal responsable de la llegada de los refuerzos desde la 'terreta'. «Aquí el baloncesto es una asignatura más, se compagina con los estudios y aprenden perfectamente a hablar inglés», explicó a SUPER.

Ese, precisamente, es el principal motivo por el que los jugadores y jugadoras acaban seducidos por el proyecto, pero también entrenadores como Joan Portero. «Quería mejorar mi inglés y salir de mi zona de confort. Me hicieron una buena propuesta y acepté al instante», comentó el preparador edetano. Incluso el actual entrenador del Valencia Basket, Jaume Ponsarnau, estuvo hace un tiempo junto a su familia en la Academia Reading Rockets durante casi seis meses perfeccionando su inglés. También su asistente, Juan Maroto, aunque durante unas semanas. «En València yo le solía dedicar al día una hora y media o dos al baloncesto, y aquí entrenamos una media de cinco horas diarias», explicó Carmen Segura. «Me ofrecieron una oportunidad de combinar el baloncesto con los estudios, cosa que en España es muy difícil, y no me lo pensé dos veces», confirmó Romero, que siente como existe «mucho respeto hacia las jugadoras y entrenadores españoles en la competición».

Un ejemplo de esto es el insólito caso vivido en su academia bajo la dirección de un entrenador valenciano. «Cuando llegué no había sección femenina, el año pasado fue el primer año que formamos equipo. En solo dos años nos hemos colocado entre las mejores academias del país», recordó Blai Benlloch, quién coordina la sección femenina en la Academia, y además ejerce como Jefe de departamento de Lenguas extranjeras y profesor de Educación Física.

Gira estival en València

Este pasado verano la Academia visitó València con los dos equipos juniors. Se midió al Valencia Basket y a la Academia Víctor Claver.