El dictador norcoreano Kim Jong-un vuelve a ser tendencia. Menudo año lleva. Primero por filtrarse un vídeo en el que tomaba un café con Donald Trump y luego porque un vídeo en el que tomaba un café con Donald Trump algunos medios confirmaron su fallecimiento ante el silencio del país asiático.

Ahora, el líder norcoreano pretende confiscar todos los perros de Pyongyang, la capital del país, alegando que estas mascotas representan la 'decadencia' de occidente, así como una "extravagancia capitalista". "La gente común cría cerdos o ganado", manifestó el político. Lo cierto es que... sea por lo que sea, también hay rumores de que lo hace para paliar el hambre de algunas zonas rurales del país. Es un hecho verídico que algunos habitantes de la zona consumen carne de perro en su dieta habitual.