Tras la 'tregua' del verano, la segunda ola del coronavirus sigue avanzando y haciendo mucho daño en todas las comunidades autónomas de España. Toque de toque, confinamientos perimetrales y distintas medidas restrictivas aplicadas por el Gobierno y las autonomías en concreto son ahora la forma de contener la enfermedad a la espera de la vacuna. Los últimos días han traído la noticia positiva del avance de la propuesta de Pfizer. Eso sí, pese a que es uno de los proyectos más avanzados usa la tecnología de "usar material genético del virus" y la OMS advierte. "Ningún país está preparado de momento para su almacenamiento" por sus características.

Noviembre avanza y al fondo ya asoma la Navidad. ¿Podrán celebrar los españoles las fiestas, aunque de forma contenida o será inviable? Uno de los especialistas que predijo cómo evolucionaría la pandemia antes de que todo explotara, allá por marzo. Mientras el gobierno tranquilizaba a la población, él ya vaticinó la que se venía encima. "Habrá que suspender todas las cirugías programadas y decidir no ingresar muchas patologías no tan graves que hoy no se envían a casa", dijo. Y vaya si tenía razón... "Se tendrán que tomar decisiones éticas muy difíciles", dijo y además añadió que los datos eran "extrapolables a cualquier otro hospital y área del país".

Bajo el pseudónimo @donni_69, este neumólogo madrileño ha advertido que si se levanta la mano en cuanto a las reuniones sociales y se abre el abanico a la permisividad, el efecto rebote puede ser letal. El especialista considera que las restricciones que se están imponiendo ahora en toda España con el cierre de la hostelería (en algunas comunidades), los confinamientos o la limitación de libre movimiento bajarán la incidencia a finales de diciembre y permitirá tener unas navidades "casi normales".

"No va a bajar casi a cero como en junio, para eso se necesitaría un confinamiento estricto, rastreadores, test masivos y demás", asegura. "Pero bajará lo bastante para desahogar hospitales y volver a sentirnos casi normales para Navidad", asegura.

El efecto post-navideño y el virus

El problema estará en el mes de enero y febrero, justo los meses en los que más frío hace. La manga ancha hará que la incidencia vuelva a subir, siempre según la predicción de este neumólogo. Y entonces aparecerá la "tercera oleada". Según el neumólogo, la Navidad será el caldo de cultivo para un tercer rebrote masivo en España. "Desplazamientos, cenas de empresa, días de vacaciones, reuniones familiares... Y todo ello en interiores sin ventilar porque cualquier en diciembre hace pelete. La tercera ola será más rápida que en verano y el frío no nos va ayudar", aseguró.

Según su teoría, en enero se juntarán varios condicionantes que pueden complicar la incidencia del virus. "En enero tendremos la tormenta perfecta: frío, vida en interiores, sensación de normalidad en Navidad, hospitales llenos y tercera ola de COVID. Y con miles de otras infecciones respiratorias para confundir tanto a médicos como a pacientes (gripe)", manifestó.