Me gusta este Valencia porque no defrauda y para bien. Tenía muchas dudas sobre el partido, es decir, sobre si el Valencia podría ganarlo, pero estaba convencido de la entrega de los futbolistas. Como equipo de fútbol, como colectivo de futbolistas con su entrenador a la cabeza, el Valencia sale muy reforzado del Vicente Calderón. Y no lo digo solo porque no se va derrotado a casa y porque ahora tiene el golaverage a favor con el Atlético de Madrid, lo digo porque hizo lo que hay que hacer en estos partidos: COMPETIR. Siempre he dicho que el Valencia jugará bien o mal, pero es un equipo honrado en el césped. Hoy voy más allá. No es lo mismo que todos los futbolistas lo den todo sobre el terreno de juego, es decir, que cada uno se vacíe y no se guarde nada, a que los once que están sobre el terreno de juego compitan colectivamente, es el salto cualitativo que le faltaba dar al equipo y el domingo lo dio compitiendo en casa del equipo más competitivo de Europa, no el mejor, pero sí el más competitivo.

EL SEÑOR ÁRBITROEL JUEGO DURO Y LA MALA BABA

Y más mérito tiene porque había un árbitro al que le pudo el partido y el escenario. El señor Latre fue pésimo porque aplicó diferentes raseros con las tarjetas y las faltas, y permitió al Atlético sacar su habitual juego sucio y marrullero. Una cosa es ser un equipo duro, agresivo o como quieran llamarlo y otra dejar la pierna o el codo en cada entrada. Eso es mala baba que el colegiado no se atrevió a cortar de raiz y que por lo tanto permitió y hasta promovió. Menos mal que este Valencia tiene jugadores que no se arrugan. Es impresentable que Javi Fuego se fuera a la ducha por dos cartulinas amarillas y que Gabi o Raúl García acabaran el partido. Por cierto, un diez para el que fichó a Mustafi y a Otamendi. Son la mejor pareja de centrales de la Liga. El Valencia empieza en ellos.

EL RESPETO ES BUENA SEÑALALGO VIO SIMEONE...

En lo que al juego se refiere me remito al juego que hizo el Atlético de Madrid, poco más, si acaso añado una reflexión, la mejor manera de que valoremos en su justa medida lo que está haciendo el Valencia es ponerse en la mente del rival y no hay más que ver lo mucho que Simeone ha respetado al equipo de Nuno. Si los rivales te temen y te respetan, buena señal; algo han visto.