Salva me dijo «estic molt enfadat per lo de Turín» y Paco no dio señales de vida hasta el viernes. A Carlos el discurso de Marcelino. Esta semana he comprendido finalmente lo que significa la Liga de Campeones para los valencianistas porque lo he sufrido en mis propias carnes: andaba tan absorto con lo de Turín, que se me ha echado encima el partido en la Cueva de Alí Babá y no he escrito una sola línea del Real Meseta. ¿Se dan cuenta del efecto perturbador que puede llegar a tener la Liga de Campeones entre nosotros? Un tipo como yo, que se reconoce a sí mismo como orgulloso antamidridista, que cobra por hacer lo que haría pagando y que ha hecho del antimadridismo una forma de vida, no tiene ganas de poner el acento en lo vergonzoso que ha sido el capítulo del supuesto dopaje de Sergio Ramos, más conocido como 'el del medio de los Chichos'.

Yo, que por antimadridista obseso no hice caso ni al bueno de Jorge Iranzo cuando me decía «no escribas de los putos» y no me arrepiento, no he encontrado esta semana el momento de decirle a Solari que hay que tener la cara muy dura para salir en rueda de prensa y decir que la razón de ser del periodismo es buscar la verdad cuando le preguntan por Sergio RamosSergio Ramo y su supuesto caso de dopaje. Solari, Ramos, por sus santas narices, se duchó antes de pasar un control antidopaje y eso está prohibido, todos los deportistas del mundo pasan el control sin ducharse, todos menos Ramos. Esa es la verdad. Si no lo quieres decir porque se enfada el Tito Floren no lo digas y hasta lo puedo entender, pero no salgas a dar lecciones a nadie porque es patético. Anestesiado como andaba desde lo de la Champions, solo la canción de sobre el Zulú de El Cifu logró sacarme del letargo. Me di cuenta de ello cuando me encontré a mí mismo el viernes por la mañana cantando en el coche a viva voz «la de segunda división fue la mejor temporada».

En ese momento me di cuenta de que es el mejor argumento que tenemos ante los galácticos madridistas que no saben argumentar más allá de enumerar las Champions que han ganado ves a saber cómo, síntoma inequívoco de que no entienden nada. Pero nada de nada. No seré tan simple de decir que vale más ganar en el Bernabéu que todas sus Champions pero sí les recuerdo una cosa, ningún valencianista se cambiaría por ellos...