Quiero darle las gracias a Marcelinopor estos dos años y sobre todo por la Copa del Rey, que el Valencia CF tiene cien años de historia y solo ocho Copas. Valga esto como medida de su trabajo. Pero hay situaciones que no se pueden entender y me siento legitimado para decirlo ahora porque lo dije en su momento. Una cosa es 'pegar la cabotà' y otra muy diferente quemar la falla en rueda de prensa y lanzarle misiles tierra aire al dueño de la empresa para la que trabajas. No trato de defender a Lim -tirar a Marcelino y poner al inexperto Celades me da pánico, repito PÁNICO-, trato de explicar lo que es difícil de entender.

El fútbol está lleno de presidentes y dueños de clubes que no hacen todo lo que les piden sus entrenadores por mucho que el entrenador garantice resultados. Es Lim quien ficha a Marcelino cuando no tiene equipo, quien no lo echa cuando muchos de los que ahora le lloran lo mataban y pedían su cese, y quien le ha permitido muchas cosas que si antes no critiqué tampoco criticaré ahora. Marcelino ha tenido mucha autonomía en el Valencia CF y poco aguante. Ese es su gran error, querer imponer su criterio por encima de todas las cosas. Ha sido fiel a sí mismo pero algún día debería entender que se puede ser buen entrenador y tener mano izquierda al mismo tiempo.

El gran error de Lim es no haber comunicado al final de la temporada pasada a Marcelino y Mateu que las cosas iban a cambiar, y así tener margen de maniobra ante una posible crisis como la que tenemos ahora en septiembre, con la temporada empezada y el mercado de fichajes echado a perder. En cuanto a los futbolistas, les diré que tras el primer impacto entiendo que estén a muerte con Marcelino pero también les recuerdo que ellos juegan y cobran del Valencia CF y no del Marcelino FC, y que sean listos, que quienes ganan o pierden son ellos. Y eso que me parece lamentable por parte del club que nadie llamara a los capitanes para decirles «vamos a tirar al entrenador». Es impresentable que un futbolista llegue a entrenar y se entere por la prensa de que han cambiado al técnico.

Por último queda Mateu. Me niego a hablar de la dignidad de otras personas, solo espero que se lo piense bien y siga. Con él, el Valencia CF es mejor. Mucho mejor. Finalmente, he querido dejar estas líneas finales para poner en valor las palabras de Marcelino a sus futbolistas al despedirse de ellos: «Los verdaderos culpables del éxito sois vosotros y tenéis que seguir trabajando con el nuevo cuerpo técnico, por favor». Ese es su legado.