No es un clamor pero sí he detectado cierto debate en torno a Kang In Lee Primero una reflexión para poner al futbolista en su contexto de mercado. Si Kang In jugara por ejemplo en el Sassuolo italiano, un equipo que no se puede comparar ni por asomo con el Valencia CF, el Valencia CF no podría pagarlo.

Digo esto porque más allá de hasta dónde llegue el coreano, se trata de un futbolista con unas cualidades potenciales determinadas que ahora mismo se pagan, y caro, en el mercado. Es la realidad. Dicho esto, la siguiente reflexión es, ¿qué ha de hacer el Valencia CF con Kang In? ¿Ha de apostar ciegamente? Yo digo que sí. Absolutamente. Y lo argumento. El Valencia CF se ha equivocado gravemente, y ese error sumado a las consecuencias económicas del coronavirus en el fútbol, hacen que tenga una plantilla que no puede pagar y se vea obligado a vender todo lo vendible y regalar futbolistas si hace falta con tal de no tener que pagarles las fichas que él mismo les había firmado. En este contexto el Valencia CF se ve obligado -insisto que por errores propios- a empezar de cero, a reconstruir la plantilla. Y llegados a este punto, tiene que apostar. Si tienes que empezar de cero, lo coherente es apostar por Kang In, no va a apostar por Sobrino, dicho esto con todos los respetos hacia Rubén. Si yo soy el Valencia CF, le digo al entrenador este tipo es apuesta del club, tiene que jugar. Y me parece bien que en los clubes haya apuestas que tengan que estar por encima del entrenador. ¿O no es una apuesta del Real Madrid Vinícius?

Otra cosa si el jugador 'apuesta' en cuestión no trabaja, pasa de todo, y llega a los entrenamientos después de estar toda la noche de farra. En ese caso no hay debate. Si el jugador 'apuesta' quiere, entrena bien y tiene buena actitud, me parece correcto que el entrenador tenga más paciencia con él. Y paciencia en el caso que nos ocupa es ponerlo a jugar. Apostar por un jugador es también no gastarse una fortuna en otro futbolista que le pueda tapar. Tercero: Si damos por sentado las reflexiones anteriores, nos vemos obligados también a dar por sentado que en el terreno de juego habrá que darle el contexto idóneo, que es por otra parte lo que está haciendo Gracia. El puesto ideal de Kang In es por detrás del delantero, rodeado. Un punta por delante, dos centrocampistas de banda en cada lado y dos pivotes en su espalda. Si arranca desde la derecha también puede hacer daño. A partir de ahí, y cuarto, será el turno de Kang In. Será el momento en que nos demuestre que tiene ilusión y ganas, que tiene fútbol en sus piernas, y que sabe aguantar la presión de que haya tantos focos sobre él. Esta temporada deber dar un paso adelante. Sabremos de verdad hasta dónde puede llegar.

Puedes leer más opiniones de Carlos Bosch en este enlace.