A Javi GraciaDe hecho, me da la sensación de que es demasiado sincero para ser entrenador del Valencia CF con la exposición que eso implica, pero la sinceridad se ha de aplaudir siempre. Su comunicado es demoledor en algunos aspectos, y está por ver si en adelante el equipo va a funcionar. Ese va a ser su gran reto. Creo que errores ha cometido dos, y ha de ser perfectamente posible decirlos con señalar al mismo tiempo que su llegada es lo mejor que le ha pasado al Valencia CF desde la salida de Mateu Alemany, pero si a estas alturas, con la que están liando Peter Lim y Murthy, ponemos el foco en que Gracia pone el cargo a disposición porque no quiere pagar para romper el contrato, o en que no es lógico no estar en un entrenamiento, es porque vivimos en otro planeta. El Valencia tiene entrenador ahora porque no ha querido pagar por marcharse y porque el Valencia no ha querido perdonarle lo que tiene que pagar por marcharse. Dicho así suena duro pero es lo que hay.

Y sí, puedo aceptar que alguien me diga que Javi Gracia no ha sabido adaptarse al caos que genera Meriton, pero la esencia de todo es que el caos no lo ha generado él. Y sobre todo, que de momento no ha nacido el profesional del fútbol que haya sabido adaptarse. Y como nadie es perfecto, pues mejor confiar en el que es profesional de esto del fútbol que tantos no hay en torno al primer equipo. De Meriton no espero nada, de Gracia y Corona espero que sean capaces de convencer a los futbolistas de que se ha terminado el circo y que esto va de ganar partidos. Porque claro, ¿qué estarán pensando los futbolistas? Primero pensarán que como la temporada pasada el funcionamiento interno del club es un caos, y segundo, y lo digo porque me consta, que a poco que Javi Gracia pierda dos partidos estos -básicamente Lim- se lo cargan. No digo que sea verdad que si pierde dos partidos se lo carguen, y no lo digo porque no lo sé, digo que sé que hay futbolistas que lo piensan. Y eso es precisamente lo que tiene que atajar Gracia. Que haya futbolistas que lo piensen es lo más normal dado el nivel de gestión que hay en el club desde Mateu Alemany, pero ojo con los jugadores, que son egoístas la gran mayoría y van a la suya. Lo peor que te puede pasar es que les des excusas, y de momento ya tenemos al club incumpliendo su palabra con el entrenador, al entrenador admitiendo que puso su cargo a disposición del club pero que sigue porque no se lo han aceptado, y sobre todo, tenemos al entrenador diciendo que los objetivos de la temporada no pueden ser ambiciosos. Eso son demasiadas excusas para una gente que rara vez asume responsabilidades porque viven en una burbuja. ¡Peligro en la Condomina! Nos queda aferrarnos a tipos como Jaume, Gayà o Soler...

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