Marlogi (Marta Lozano Giménez) es una de las corredoras populares valencianas más activas y que, antes de que el coronavirus atacase tan brutalmente al atletismo popular, más se prodigaba participando en un sinfín de carreras. Hasta 42 maratones llegó a acumular desde 2010 a 2019 cuando decidió bajar el ritmo, recortar kilómetros y emprender otra aventura: ser madre. Incuso embarazada Marlogi siguió corriendo, participando en carreras mientras su pequeña Alma crecía en su interior. Tuvo que llegar una pandemia mundial para frenarla... Y ni eso, porque ahí siguió: corriendo en los 7 metros de pasillo de su casa. Ahora Marlogi sigue poniéndose dorsales, los de las carreras virtuales a las que se ha aficionado y que son ahora, su motivación.

En la 'nueva normalidad' y mientras llega la añorada y vieja normalidad al mundo del atletismo popular, Marlogi se ha convertido en una asidua de las carreras virtuales. Son ahora su motivación para seguir en forma, para no parar. Desde que en el mes de mayo, con la desescalada, el mundo del running se reinventó con este nuevo formato de carreras, Marlogi ha participado en un gran número de ellas: «Me inscribo a todas las que puedo sobre todo si son solidarias. Yo estaba acostumbrada a participar en carreras prácticamente todos los fines de semana y, aunque no es lo mismo, las carreras virtuales son una motivación para entrenar, para conservar una pequeña parte de lo que teníamos».

Entre sus favoritas está el Circuito Virtual RunCáncer.

Entre sus favoritas está el Circuito Virtual RunCáncer.«Cuando lo crearon no dudé en apuntarme. Toda la recaudación es para la AECC de València. Ya participaba habitualmente en las carreras del circuito tradicional y ahora, más que nunca, es necesario que colaboremos». También participó en el Maratón virtual de Madrid, una prueba a la que estaba inscrita «y que no se celebrará por desgracia». Tampoco tiene muchas esperanzas en poder correr el Maratón de Valencia para el que también tenía dorsal este año «no creo que se pueda celebrar, lo tendremos que dejar para 2021 , es una pena pero no queda otra».

En su afán de buscar retos, de ponerse metas, Marlogi ya ha encontrado una (también a distancia): el maratón de Nueva York. «Este año será también virtual así que es una buena ocasión de correrlo aunque sea simbólicamente. Tener en el horizonte inmediato un maratón, aunque sea virtual, es un aliciente para mí», afirma la corredora valenciana que ya casi ha recuperado la forma tras el confinamiento y la maternidad: «cogí 20 kilos pero ya he quitado 16. No ha sido fácil porque se me juntó la maternidad con el confinamiento y cuesta volver a coger la forma».

Marlogi echa de menos sobre todo el ambiente del mundillo del atletismo popular: «las carreras tienen un alto componente social, ves a la gente, compartes muchas cosas, es mucho más que competir». De momento, la valenciana, que forma parte del Kenyan Urban Way que dirige Raquel Landín, ha preferido no reanudar los entrenamientos de grupo y seguir entrenando sola: «Raquel lo organiza todo muy bien, con grupos reducidos, pero yo de momento, no he ido aún».

La valenciana está muy concienciada con la situación que estamos viviendo y ve sensato y lógico que de momento, no se celebre carreras: «No hay que precipitarse. Ahora toca ser prudente. Cuando estoy en la línea de salida de un maratón yo siempre digo a los de mi alrededor que lo importante es que todos lleguemos a la meta y eso se debe aplicar también a la situación en la que estamos».

Marta, que en septiembre cumplirá 40 años quiere seguir sumando maratones en cuanto pueda. Entre 2010 y 2019 corrió nada menos que 42. «¡por supuesto!.Me propuse llegar a los 42 maratones antes de ser madre y lo logré pero ahora quiero seguir».

Como para todos los corredores populares, el confinamiento fue una época difícil para Marlogi: «corría en el pasillo de mi casa, de 7 metros de longitud, para no perder del todo la forma, pero era complicado. Luego, cuando dejaron salir a correr, me daba un poco de miedo y tardé tres semanas en hacerlo. Mi hija tenía sólo unos meses y no quería ponerla en riesgo. Luego, poco a poco empecé a salir a correr muy pronto por la mañana para no cruzarme con mucha gente. Hay que ir poco a poco pero tenemos que seguir entrenando, corriendo y no perder la ilusión para que cuando regresen las carreras, nos pille preparados».