Filipe rompió el cascarón en la Copa Sao Paulo, uno de los torneos juveniles más prestigiosos del planeta. El nuevo mediocentro del Valencia destacó en los campos donde nacen las grandes estrellas del fútbol brasileño. En la edición de 2012 se confirmó como uno de los atletas más prometedores del Esporte Clube Bahía de Salvador y fue elegido como una de las 20 revelaciones del torneo.

Aquellos partidos terminaron de lanzarlo. Después hizo su debut con el primer equipo del Bahía en el Estatal bahiano de la mano de un mito como Paulo Roberto Falcâo. La leyenda de Inter de Porto Alegre y Roma tuvo un ojo exquisito, a la altura de su buen pie con el balón. El Bahía salió campeón y Filipe fue citado por la selección brasileña Sub20 de Ney Franco para conquistar el Torneo Internacional Ocho Naciones. Después, con 18 años, fue adquirido por Gestifute (por más dos millones de euros) que lo llevó al Rio Ave. En su primer curso en Portugal estuvo cerca de disputar el Sudamericano Sub20 de 2013, pero finalmente fue descartado por Emerson Ávila.