«Necesitamos un entrenador capaz de aportar liderazgo y un nuevo enfoque para el equipo. Alguién capaz de entender a la afición y la sociedad». El pasado lunes, Layhoon entró en escena para amurallar y guarnecer al Valencia CF. La presidenta desmontó a Nuno, lo desligó del proyecto y dibujó el perfil de un entrenador concreto como como referente, idóneo para reanimar el vestuario, cualificado para vigorizar el fútbol del equipo y con el carácter necesario para ilusionar de nuevo. Layhoon puso el acento en la personalidad o la experiencia —no en la trayectoria— y separó su figura de la influencia de Mendes. La gobernante habló con tanta seguridad porque la decisión estaba tomada: Gary Neville es hombre del cambio. Layhoon ha cumplido con el guión prometido, pero también ha puesto alto el listón.

Peter Lim es consciente de que buena parte del crédito y la credibilidad del proyecto van en esta apuesta. Asume todos los riesgos y prefiere ser valiente: va a muerte con Gary Neville (40 años). El propietario singapurense conoce bien al inglés, su forma de ver el fútbol le vuelve loco y está convencido de sus aptitudes como entrenador van a generar el impacto necesario para enganchar a la gente y para que el equipo vuelva a ser un equipo. El inglés no es el nombre que se esperaba, pero es el hombre en quien confía la propiedad para dar un giro y oxigenar el club, a todos los niveles. No es un experimento, es cuestión de confianza.

‘Nueva’ influencia futbolística

En una situación crítica, Peter Lim vira hacia su otro círculo de influencia futbolística: Manchester, el Salford City y la 'Generación del '92', mitos como Paul Scholes, Nicky Butt, David Beckham, Ryan Giggs y los hermanos Neville, Phil y Gary. El primero llegó al Valencia CF el verano pasado, como miembro del cuerpo técnico de Nuno. Hasta el domingo —Barça incluido— será el apoyo de Voro y a partir de entonces será asistente de Gary. Ahí empezarán a preparar su debut ante el Lyon, en Champions. Para arrancar necesitan un pequeño milagro: ganar y que el Zenit rasque algo en Gante. La pifia ya está hecha y en el peor de los casos espera la Europa League. Otra competición para ilusionar, como la Copa, que recién empieza o La Liga, en la que le quedarán 24 jornadas y una distancia prudente para pensar que la zona Champions no es inaccesible. El Valencia está a tiempo de casi todo, si se levanta. Puede firmar una gran temporada o liquidar un curso mediocre. Sólo necesita que Gary Neville acierte. En sus manos queda (parte de) la responsabilidad.

Los dos hermanos guardan una estrecha relación personal con Peter Lim, son amigos, comparten varios negocios y la propiedad del Salford City, pero la decisión está fundamentada en fútbol.

La adaptación y su estilo

Gary Neville firma hasta junio de 2016, por el momento. Si falla, el club tendrá margen para actuar en verano. Si cuaja, su compromiso está por encima del papel. Las partes son conscientes de la situación del equipo y prefieren ir paso a paso. Es momento de trabajo. El inglés tiene clara la responsabilidad. Peter Lim lo considera un fuera de serie, pero el fútbol son resultados, que el balón entre. También deberá superar un proceso de adaptación: la competición, el idioma (no habla español), el campeonato, el club. Todo será nuevo, aunque ya ha estado en Valencia y conoce las instalaciones de Paterna. Hoy dará otro paso, aunque necesitará estar bien rodeado. A la hora de transmitir sus ideas y comunicarse —parte fundamental— su hermano Phil jugará un papel clave en los primeros meses; para eso lleva estudiando desde su llegada.

El técnico inglés brindará desde ahora la oportunidad de profundizar en su abecé futbolístico. Algo que hasta ahora sólo ha perfilado como analista y columnista, vía comentarios en Sky Sports o en artículos en el The Daily Telegraph. Faceta que deja aparcada, renunciando a cuatro millones de euros por año. Gary era el alma del programa Monday Night Football, brillate en sus exposiciones, incisivo e inteligente, pero además con capacidad para mezclar esa visión privilegiada con una buena dosis de frescura, descaro y gracia. Es un tipo agradable y natural. Justo lo que hace falta en el VCF. Engancha, aunque el trabajo sobre el césped es otro cosa.

Novato, pero con madera

Como primer entrenador y referencia final de un proyecto, está será su primera experiencia. Ese es el riesgo. Lim asume ese punto de aventura porque está convencido de que su calidad y su trayectoria actuarán de contrapeso. No es un novato del fútbol, al contrario. Del tema sabe y batallas como futbolista tiene un rato. No hace falta presentarlo. Su fichaje ha dado la vuelta al mundo. Es una leyenda del fútbol británico y de Old Trafford. Diecinueve temporadas como líder en un vestuario tan potente como el del Manchester United, hombre fuerte de Alex Ferguson, más de 20 grandes títulos, 85 partidos con la selección inglesa, grandes éxitos y fracasos de todo tipo en Champions, en mundiales y eurocopas. Sabe como se gestiona el éxito y también la derrota. El escenario que se va a encontrar en el Valencia CF es duro. Tendrá que reconstruir un equipo colapsado a todos los niveles, comprometido, pero necesitado de refuerzos positivos y soluciones naturales, sencillas. Menos tensión, menos crispación. Más trabajo, normalidad. Ese es el principio.

Clave en la selección inglesa

Apreciado como activo imprescindible dentro de la federación inglesa, Gary Neville continuará como assistant coach del seleccionador Roy Hodgson. Hará compatibles los dos cargos hasta después de la Eurocopa de Francia. La Ciudad Deportiva de Paterna y St George’s Park serán sus dos casas. El nuevo entrenador del Valencia CF es una pieza esencial en el cuerpo técnico. Hodgson lo incorporó en mayo de 2012 para ser su segundo de abordo. Esa es otro de las referencias ineludibles que sirven para valorar su ideario. Lleva tres años como asistente en uno de los combinados nacionales que más atención producen y más presión soportan. Gary ha liderado el cambio generacional que ha dado paso a jóvenes como Eric Dier, Dele Alli, John Stones, Ross Barkley, Jesse Lingard o Harry Kane, ha ido ganando peso y la evolución competitiva —en positivo— de los ingleses no se entiende sin él. Un par de fases de clasificación y un mundial lleva a sus espaldas.

Gestor del talento

Gary Neville es consciente del perfil de la plantilla que se va a encontrar: mucho talento, mucha juventud, margen de mejora, pero inexperiencia. Algo que se ha sentido en situaciones de alta tensión. Sabe que debe brindarles el contexto adecuado para crecer, jugar sin miedo y desarrollar su versión más competitiva. Su perfil encaja porque valora al máximo la función de La Academia, por ese plus de vida, energía e identidad que genera, como reforzó la propia Layhoon el lunes. Capitanes y líderes hechos en casa, como él, que fue estandarte y jugador de un sólo club en el Manchester United. Uno de los aspectos que han sido clave a la hora de valorar su contatración es que, como sucede con muchos futbolistas, la propiedad considera que Gary Neville es uno de los entrenadores con el futuro más brillante del panorama internacional. La juventud es el valor que define en esencia las líneas maestras del proyecto Lim.