Un ciclista ha protagonizado un peligroso adelantamiento en Barcelona que casi acabó en tragedia. El ciclista en cuestión hizo varios adelantamientos peligrosos, pasando por delante de un coche que podía haberle arrollado, y que no lo hizo por poco.

El conductor de este vehículo se enfado mucho tras lo sucedido, considerando que había puesto en peligro a ambos: "¡Es que hay que ser gilipollas!". Ahí desde el coche de este conductor comenzaron a grabarle con el teléfono móvil.

Apenas unos segundos después el ciclista, que trataba de adelantar por el carril contrario a otro coche, sufrió un choque frontal con otro vehículo que venía de cara mientras intentaba frenar, dado que llegaba de girar una curva. El ciclista no ha sufrido heridas graves pero ha sido multado con 500 euros por conducción temeraria.