No creas que te doy la razón. No te vengas tan arriba, que no te voy a dar ese gusto. Porque veo que no te mojas. Ni vas, ni vienes. Amagas, pero no das. Ni sí, ni no. Hay que mojarse, ¿aprueba o suspende el Valencia CF al final del año? Esa es la cuestión, Salvatore.

Si digo que el 2015 ha sido malo, miento y peco de no tener memoria. Y tendré muchos defectos (que te aseguro que los tengo), pero de memoria aún voy muy sobrado. Y apostillo, como en los memes de Julio Iglesias, «y lo sabes».

Puedo parecer el abogado defensor de Nuno -nada más lejos de la realidad- pero el comienzo del 2015 fue bueno. De hecho, comenzó con una victoria por 2-1 ante el Real Madrid que venía de ganar el Mundialito, la Intercontinental, la Intergaláctica y el Trofeo Darth Vader, de todas las galaxias.

A aquel Real Madrid de los récords de Ancelotti se lo cargó el Valencia. Sería injusto olvidarlo. Tampoco sería de justicia obviar que el equipo alcanzó el objetivo de entrar entre los cuatro primeros en un campeonato disputadísimo. Los 77 puntos -récord de puntos, que no mejor clasificación en la historia del club- dieron para aquel gol agónico de Alcácer en Almería. A un punto de quedar fuera de la Champions y a uno de ser tercero. Claro que no me olvido de cómo se tiró miserablemente la Copa del Rey con un cuadro fenomenal en el sorteo, pero sí, Folgado. El comienzo de 2015 digo que fue muy bueno, le pese a quien le pese.

Pero claro, los últimos meses también cuentan para este repaso al año y afean mucho lo conseguido al principio. Te voy a decir más, lo desvirtúan. Tenemos una conciencia de que se consiguió menos de lo logrado por el mal sabor de esta temporada.

Te lo explico de otro modo, verás. Tengo un amigo que se dedica a la hostelería, y le va muy bien. Un día le pregunté porqué ponía especial mimo en los postres que servía y me lo explicó de la siguiente manera: «tú puedes servir un primer plato delicioso, un segundo plato espectacular, pero si al cliente le sale una cucaracha en los postres todo lo hecho anteriormente se irá al garete. A ese cliente lo pierdes...». Al Valencia, Salva, le ha salido la cucaracha en los postres. Rodrigo Caio, Nuno, Mendes, los fichajes que no refuerzos, la amarga Champions League, las constantes lesiones, la marcha en la Liga... Eso hace que el notable de los primeros meses, se quede en un aprobadito raspado.

Puede que sea algo injusto, pero a veces las percepciones te condicionan. Y además ya se sabe que el fútbol no tiene memoria... Aprobado raspado, aunque con matices.

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