Le doy la enhorabuena al Valencia. Y es una enhorabuena merecida y justa. Estar ya casi clasificados par la Champions a falta de diez jornadas es un éxito rotundo que solo merece un aplauso enorme a este espectacular cambio en la hoja de ruta. Responsables hay muchos pero yo me quedo por encima de todos con Alemany. Recuerden que fue él quién trajo a Marcelino al Valencia y ese mérito es enorme. Tan enorme como crucial ha sido el trabajo del propio Marcelino con la justita plantilla que tiene. Ojo, digo plantilla justita pero obviamente es mucho más equipo que en épocas pasadas. De cualquier forma existe un dato sobre el que merece la pena hacer una pequeña reflexión. Cuando el Valencia se implicó a lo bestia en Copa del Rey el equipo bajó de forma alarmante sus prestaciones en Liga. Y eso quiere decir un par de cosas. La primera es obvia, la plantilla es más o menos corta pero sí sabe lo que se lleva entre manos. Y la segunda es más obvia todavía: tenemos pocos jugadores y luchar en dos competiciones desgasta un disparate.

El Valencia bajó muchos enteros en Liga mientras daba bien la cara en Copa del Rey, y eso evidencia que la plantilla es escasa para hacer frente a dos competiciones al mismo tiempo, es cierto que ha mejorado un disparate pero es una plantilla muy corta, muy justita. Y obviamente eso quiere decir que sí, que si estamos contentos por tener la Champions casi en la palma de la mano, pero también obliga a programar todavía con más tino la plantilla para la próxima temporada. Piénsenlo bien. Estaremos en Champions y eso implica un desgaste que la actual plantilla no puede cubrir sin desmallarse en alguna competición. Fichajes, eso implica fichajes para la próxima temporada y esos fichajes deben empezar a programarse ya mismo. Miren, el éxito de la actual temporada, un éxito cada vez más claro ya que la próxima campaña el cuarto no tiene que empezar la competición antes de tiempo, es ya una realidad que obliga a programarse.

Compras, cesiones, traspasos... vale todo con tal de formar un equipo mucho más potente y mucho más compacto para una temporada, la próxima, que va a resultar exigente para el Valencia. Nos alegramos del éxito y de los humanos que lo han conseguido. Pero advertimos que debemos seguir cambiando para potenciar al equipo. La Champions está ahí pero también estará ahí la Liga y la Copa del Rey. Y eso obliga a cualquier club a tener una plantilla más compacta y competitiva, lo que quiere decir que debemos empezar desde ya a pensar en fichajes. Este nuevo Valencia de la era Alemany y Marcelino debe empezar a crecer y a estructurarse desde ya pensando en la próxima campaña. De entrada, como muy bien publicaba Superdeporte en sus páginas dos y tres de su edición de ayer lunes, hace falta un lateral derecho como el comer.

Marcelino lo ha probado todo y todo lo que ha probado ha resultado insuficiente. Jugando solo la Liga te puedes apañar más o menos por el potencial del resto del equipo. Pero lo cierto es que para estar en Europa y en esa posición no valen ni Montoya, ni Vezo, ni Gabriel Paulista.Y por ahí es por donde tiene que empezar a crecer y a pensar en el futuro este Valencia. Hay posiciones que necesitan ser mejoradas y eso no se hace tranquilamente en verano. Hay que empezar ya sabiendo lo que quieres y sabiendo cómo conseguirlo. Es lo que sucede cuando un equipo crece.

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