Hay temporadas en las que suceden muchas cosas juntas. Este es un año sensacional, desde el punto de vista deportivo. A nivel de Champions, por ejemplo, estamos viendo concentración de gestas. Como espectador despreocupado, estoy disfrutando de Europa como un chino. Del Barça dando un repaso a la Roma en la ida, a verse repasado y expulsado en la vuelta. De la Juve jugando de tú a tú al Madrid, con chilena mediática en la ida y repaso, y repaso devuelto y escándalo arbitral en la vuelta. Y el Liverpool machacando a la Roma y demostrando que vuelve a por sus fueros. En otra dimensión, la salvación del Levante también está teñida de épica, por los goles y sus minutos. El fútbol está dando espectáculo, tras años más bien sosos. Pero aún hay que resolver que siempre ganen los mismos.Globo sonda

Cuando ves que en una Final de Copa el Barça puede meterle cinco al Sevilla, te quedas hecho fosfatina, como espectador. Te dan ganas de emigrar a otros deportes. No hay emoción, pasión, prestigio ni honor en una final edulcorada, sin rival. Lo peor es que podría haber sido el Sevilla, o cualquier otro, así que los sevillistas pueden estar tranquilos, que nos hacemos cargo. Por ese motivo, los protagonistas deportivos del Valencia CF vienen dando señales en los últimos días, para que el globo sonda llegue a quien tenga que llegar. Parejo se vio preguntado por Guedes y, aunque intentó eximirse de ser el sujeto pasivo de la pregunta, no pudo evitar dejar un titular. Él sí lo ficharía. Del mismo modo, Marcelino deja claro que para estar entre los grandes solo hay un camino: seguir creciendo.Ingeniería

Si lo que queremos es estar compitiendo con el Madrid y el Barça, como hace el Atlético, hay que empezar por asumir que, aunque nos hayamos clasificado para Champions, lo que ha pasado este año no deja de ser algo excepcional. No acabamos de dar crédito a lo que vemos. Esa no era nuestra liga, a priori. Y si no sacan los dueños la plantilla Excel y nos dan una exhibición de creatividad financiera, será fácil volver a la senda de la mediocridad. Futbolistas como Guedes, Mr. K, e incluso resistir el canto de sirena de las ofertas por Rodrigo, son objetivos tan importantes como el fair play financiero. ¿Cómo se come esa contradicción? ¿Cómo se hace frente al erial económico y a la vez se tira de cartera, sin caer en los viejos errores del pasado?Imprevisible

El Valencia tiene en sus manos ser flor de un día€ o ser un grande más, como antaño. Marcelino sacó balones fuera cuando le preguntaron por su estabilidad en el club, en un intento de asemejarlo con Simeone. El míster no se dejó envolver en comparativas, y es lógico que espere a ver qué coche va a tener, para decidir cuántos años quiere competir y así no hacer un 'Alonso'. Vino a decir que aquí hay que consolidarse, y no dar por sentado nada. El fútbol es imprevisible. ¡Que se lo digan a Emery, que ha anunciado a sus jugadores que no sigue en el PSG! Pero ahora mismo disponemos de un equipo sólido, efectivo, pero no suficiente para las grandes citas: ahora mismo, podemos ganar y perder cada partido, contra el rival que sea, de la entidad que sea.Conjura

Para el partido de esta tarde contra el Eibar, el equipo está conjurado para ganar y tratar de clasificarse matemáticamente para la Champions. No es moco de pavo, porque el año pasado este equipo nos ganó 0-4 en Mestalla, con la expulsión de Soler, con Voro en el banquillo, en un partido antipático que vació la grada del estadio, el día en que tocamos fondo. En cambio, con Paco Ayestarán hace dos años se ganó 4-0 con el último hat- trick de Paquito Alcácer, antes de su exilio (si es que el fútbol está loco). Ahora estamos en esa montículo del calendario que nos viene mal. Recordemos que en la primera parte de la Liga contra el Barça empatamos 1-1 en Mestalla, luego perdimos contra el Getafe, después ganamos apuradamente al Celta 2-1 y€ perdimos contra el Eibar.

Qué farem

Fue un 2-1. Tuvimos dominio, nos marcaron, Mina empató y en los últimos minutos Jordan nos marcó el gol de su vida. Estamos un poco en las mismas, en la vuelta. Perdimos contra el Barça, luego contra el Getafe de nuevo, y rascamos sólo un punto en Vigo. Contra el Getafe hicimos un triple cambio, lo que significa que íbamos a la desesperada. No ocurría en Mestalla desde la temporada 08-09 en un partido contra el Valladolid, precisamente con Emery en el banquillo (antes; Marcelino ya lo hizo en Anoeta).. Aparte de la parada de marras de Neto en cada partido, nos marcan con mucha facilidad. Hoy debería romperse el maleficio, y el día y la hora son propicios para que Mestalla sea una fiesta, para que la grada lo celebre, para regresar a la élite. Marcelino ha aislado a los jugadores del ruido, los tiene pensando en el Eibar las veinticuatro horas. Como todos con la Champions.

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