El Valencia CF comenzará La Liga con un partidazo frente al Atlético de Madrid. Este será, sin duda, el plato fuerte de la primera jornada en el penúltimo fin de semana de agosto por encima de lo que tengan que hacer Barcelona y Real Madrid. Sin embargo, pese a que será con diferencia lo mejor del programa, la Liga decidió que el partidazo con el que empezará la que dice mejor competición de fútbol del planeta no se juegue ni en sábado ni en domingo, sino... ¡en lunes! Y a las ocho de la tarde, un día laborable a una hora en la que muchos valencianistas tendrán aún que estar trabajando. Y todo por petición expresa del Atlético, que el 15 de agosto debe jugar la Supercopa de Europa contra el Real Madrid. Ese partido europeo es algo que al Valencia no le incumbe y de haber sido al revés, seguramente, los de Mestalla se hubieran visto obligados a jugar el domingo por tratarse del mejor partido de la primera jornada de la liga española.

Maltrato al aficionado

No se trata de quejarse por quejarse, ya que los horarios de esta competición son los que son, pero una vez más se ha decidido por todos los clubes españoles sin contar con todos, por no decir...contando solo con unos pocos. Quizá, la Liga haya pensado que el lunes 20 de agosto, por ser aún el clásico mes del verano, todavía habrá mucha gente de vacaciones y liberada de sus obligaciones laborales, puede ser una buena fecha para colocar este encuentro en Mestalla. Mi opinión, no obstante, es que se está maltratando así a la propia competición cuando el más atractivo de los duelos de una primera jornada queda aparcado para un lunes a las 20:00 horas. Un horario malo, incluso, por el calor que hará en pleno mes de agosto. ¿Qué habría costado fijar un Valencia-Atlético de Madrid un domingo en plena noche, a las diez y cuarto? ¿Tanto acusaría el Atlético un descanso de casi cuatro días tras la 'importantísima' Supercopa europea del día 15 en Estonía? A la postre, por encima incluso del torneo, los que pagan con este tipo de decisiones son los fieles seguidores en los estadios del país, en especial, los valencianistas en Mestalla.Defensa cubierta

Para el 20 de agosto lo que parece seguro es que el Valencia de Marcelino tendrá bien cubierto el centro de su defensa. Durante las pasadas semanas se ha puesto en duda el fichaje de un central, gastando tanto dinero como el invertido en Diakhaby, para una posición que parecía a priori sin fisuras, y yo el primero; pero he de admitir que el año pasado el equipo sufrió demasiados problemas con las lesiones de defensores como Gabriel Paulista, Jeison Murillo y Ezequiel Garay. Ninguno de los tres es ya un juvenil y los tres son propensos a lesionarse, así que uno empieza a entender mejor la apuesta realizada en un zaguero del estilo Diakhaby: Joven, físico, con proyección y complemente perfecto de los teóricos titulares. En esta semana de trabajo en Suiza todos hemos visto un buen ejemplo con la lesión en la espalda de Paulista y el susto muscular que pedeció ayer el colombiano Murillo.

Piccini jugará mucho

PicciniPor cierto, como publicó SUPER hace unos días, si Martín Montoya sale del Valencia CF -vendido al Betis, al Nápoles o al equipo que sea- Marcelino tiene claro que no va a fichar otra vez un noveno defensa. Es decir, no habrá otro lateral derecho puro que compita con Cristiano Piccini si Montoya deja el equipo. Sinceramente, es una situación que me sorprende, creía que el entrenador exigiría otro lateral diestro. Su suplente y en quien confía para hacer de apagafuegos defensivo en el carril diestro, como demostró la pasada temporada, es el portugués Rúben Vezo. Servidor lo cosidera una jugada un tanto arriesgada, pero lo cierto es que esa es la decisión que se ha tomado a estas alturas de mercado. Más claro aún es que si Piccini lo hace medianamente bien, va a jugar mucho.

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