Se cerró el mercado de enero y se han marchado Vezo, Batshuayi y VezoBatshuayiMurillo y para compensar esas salidas, el Valencia ha fichado a última hora a Rubén Sobrino y al argentino Facundo Roncaglia. Dos nombres que en principio no es que no hayan ilusionado, sino que han generado cierta desilusión entre el valencianismo al tratarse de dos futbolistas que vienen de equipos menores y, encima, ninguno de ellos era titular habitualmente ni en el Celta ni en el Alavés.

Sin dinero

Yo, sin embargo, tengo una opinión muy diferente respecto al mercado de enero en el Valencia CF. Pienso que este mercado es muy complicado si no tienes dinero, o si no aparece una gran ganga de las que a priori no tenías constancia que podría existir antes de que se abriera la la ventana de fichajes de invierno. El pasado año, el Valencia firmó muy pronto porque tenía claro lo que quería y también tenía dinero para poder acudir al mercado. Éste año la situación ha sido muy diferente porque el club ya había agotado su presupuesto para fichajes con la enorme inversión hecha el pasado verano y por tanto, en la entidad se han visto obligados a manejar las fichas de los jugadores que salían para poder traer jugadores.

Chicharito

La idea inicial era traer un delantero, y ese delantero estaba muy claro, se trataba del mexicano Chicharito Hernández. Sin embargo, su contratación ha sido absolutamente imposible porque el club sólo contemplaba su llegada como cedido y el West Ham únicamente quería quitarse de encima el futbolista si era mediante un traspaso. Desde principios de diciembre se trabajó ese fichaje, pero hace apenas tres días el club lo dio por imposible al ver que en los últimos días de enero el club inglés no cedía en sus pretensiones. Ante la negativa del club londinense, el Valencia ha actuado con cabeza, responsabilidad e inteligencia pese a que estoy seguro de que en el club sabían que los dos jugadores que firmaban no iban a levantar ninguna expectación.

Sobrino

El fichaje de Sobrino me parece un acierto total en este mercado de enero porque el club ha sabido variar su objetivo inicial y acoplarse a las necesidades que tiene actualmente el equipo. A finales de diciembre, principios de enero, era indispensable que el club fichase a un goleador ante la acuciante falta de gol, pero ahora a final de enero y cuando parece que definitivamente el equipo ha despertado hubiera sido un absoluto error traer a un futbolista como el Chicharito con el rol de titular y tener que sentar a cualquiera de los tres delanteros que ahora mismo sí están rindiendo a un nivel parecido al que de ellos se espera. Rodrigo ya firma cinco goles en tres partidos, Mina no está teniendo tanta suerte cara al gol pero está provocando que Rodrigo se reencuentre con su mejor versión haciendo ese papel y ese trabajo feo que el año pasado realizó Zaza. Y Gameiro ha comenzado el año siendo otro futbolista, aportando siempre cosas interesantes desde el banquillo y siendo decisivo con dos asistencias que hoy en día son clave para la recuperación del equipo. Ante estos argumentos, entiendo perfectamente que Alemany, Longoria y Marcelino hayan decidido apostar por un perfil más bajo, un jugador que no es un goleador nato pero que vendrá a Mestalla con todo el hambre del mundo ante la oportunidad de su vida. El manchego sabe lo que es la Liga y con sus cualidades que son calidad técnica y velocidad seguro que aporta mucho más que Batshuayi. Un fichaje a bajo coste que si el próximo verano no termina de convencer tendrá fácil salida por un precio parecido al que sea pagado.

Roncaglia

En la defensa se marchó Murillo y a última hora se cerró la salida de Rubén Vezo. El portugués, ha alternado algunas actuaciones buenas con otras absolutamente desesperantes que han hecho que el técnico asturiano haya perdido definitivamente la fe en él. En su lugar, ha llegado el argentino Roncaglia, un jugador experimentado y que si bien es cierto no estaba teniendo su mejor temporada en el Celta es un futbolista con veteranía y empaque suficientes como para poder ser el cuarto central o segundo lateral derecho de este equipo. En el Valencia, siempre han funcionado los jugadores que han levantado poca ilusión a su llegada pero que con trabajo en silencio y sacrificio han demostrado que pueden ser muy válidos. En la tesitura en la que estaba el club a nivel económico y viendo la necesidad de la plantilla final de enero el Valencia ha tomado decisiones inteligentes en el mercado.

A por el Barça

Para cerrar, sólo puedo decir que lo que se vivió el pasado martes en Mestalla es una de esas noches que guardaré en mi corazón para siempre y prometo que no hay dinero para pagar el cariño que tanta gente nos ha dado estos días por la retransmisión de unos goles que sacaron las lágrimas de varias generaciones. Ojalá la del martes sea la primera de varias noches mágicas esta temporada en el Santuario. Marcelino acertó de lleno con los cambios y ahora sí parece que el equipo despierta, ojalá porque aún hay tiempo de todo. Ahora a por el Barça.