Darwin Núñez es un futbolista de complexión física espectacular, europea, como solemos decir en Sudamérica. Un físico tremendo para jugar al fútbol y para la posición en la que se desenvuelve, de delantero. Lo vi crecer en mi etapa como director deportivo de Peñarol, con Leonardo Ramos fue ascendido al primer equipo porque ya se le veía un potencial tremendo en la definición, en las transiciones defensivas y ofensivas, donde es un jugador muy importante. Sobre todo, el futuro que tiene. Aunque ya es un futbolista internacional por la selección absoluta de Uuruguay tiene mucho para crecer, tiene un desarrollo importante.

Aspecto defensivo: en la pelotas quietas en contra siempre utiliza la zona corta, para hacer el despeje, tanto en las faltas laterales como en los córners, si se necesita una marca personal a algún rival como buen remate de cabeza, puede hacer la marca. Después, en las transiciones defensivas en jugadas es un futbolista que tiene el ADN uruguayo, no deja de correr, no deja de luchar, siempre se posiciona por detrás del balón, es decir, siempre trata de reducir espacios hacia atrás, con la línea de medio campo para intenar que no haya espacios y que el mediocentro rival no juegue cómodo.

En transiciones ofensivas, su potencial está relacionado con su físico, espectacular, tiene una zancada muy amplia, una velocidad diferente al resto, sabe utilizar muy bien los espacios. Es un futbolista que ataca muy bien los espacios, si sus compañeros saben salir en transición ofensiva, él siembre sabe estar posicionado en la zona donde hay menos hombres del rival.

Después, también tiene muy buen cabeceo por su altura, mide unos 188 centímetros y no le tiene miedo al roce. Es un futbolista que si tiene que poner pierna fuerte, la pone. Puede hacer un gol de rebote, como un magnifico técnicamente. Considero que estamos hablando del futuro de la selección uruguaya a nivel de delanteros, lo mismo que Maxi Gómez. Lo vi crecer en Peñarol, donde en todas las divisiones formativas demostró su olfato goleador y, sobre todo, su potencia de arranque para utilizar los espacios. A nivel global, lo considero un chico que tiene una gran corpulencia física, pero en el buen sentido, la utiliza muy bien y es un muy buen pibe.