Perdónenme el juego de palabras, pero en estos momentos en los que la Liga española ya ha vuelto, en que los pleitos en Francia han paralizado los descensos de la primera división, que en Bélgica, sin embargo, han perdido los dos equipos que pedían a la justicia que se les mantuviera en la categoría reina de aquél país, no me queda más remedio que preguntarme eso: ¿dónde vas, fútbol?, pero cambiando el vadis (vas) por el covid...

Son cosas de la edad seguramente, y cada vez me gusta más jugar a esos escondites gramaticales. Pero, vayamos al grano, que no es otro que lo que estaba esbozando antes, la idea de que los pleitos ya han comenzado y algunos resultados se están dando, en forma contradictoria.

Por ello, el pasado 11 de junio, la FIFA (me dicen los puristas que hay que decir 'la' Covid, pero no sé, me suena más a un bicho masculino...), y, en concreto, ante la avalancha de solicitudes, nos ha entregado un documento en el que responde a las preguntas más habituales que nos hacemos todos.

Así, la famosa declaración de fuerza mayor que hizo FIFA el 7 de abril pasado, la matiza ahora indicando que ello no implica que sea así en ningún país y que los contratos y los traspasos no tienen por qué, por mor del Covid, tener efectos debida a esa fuerza mayor.

¡Ya era hora! En efecto, lanzar a principios de la pandemia esa imagen de que todo era fuerza mayor produjo una falsa situación legal, con clubes y jugadores en tensión constante por el «ya lo dijo FIFA». Pues no, señores, FIFA ahora se retracta y dice que cada lugar del mundo y cada federación miembro de ese organismo deberá decidir caso por caso, con las leyes del lugar.

Bienvenida sea esa respuesta y aclaración a lo que (casi) todos pensaban era palabra de Dios... Partiendo de esa base, ya no va a ser tan fácil argumentar que FIFA y su (supuesto) paraguas legal era y es suficiente para actuar de una forma unilateral, rebajando contratos, rescindiéndolos o actuando de forma irracional, debido a esa 'fuerza mayor".

Es cierto, también, que en la mayoría de países europeos no ha sido así, pero son 211 los miembros de FIFA y ya hay muchos casos basados en esa presuposición fifesca, que ya no lo es...

Y, pasando a otro punto, la indicación (pero casi obligación, si leíamos la guía de FIFA de abril) de que los contratos debían ser extendidos más allá del 30 de junio, aún cuando finalizaran; ahora nos dice el máximo organismo que «recomienda fuertemente» que se dé prioridad a la continuación de los contratos. Eso ya lo comentaba, pero la novedad es que manifiesta que, si un jugador acaba contrato en esa fecha y firma por otro club, «hay un riesgo de que el jugador no sea registrado, ya que el periodo de transferencia puede haber sido modificado y que podría no ser elegible para jugar partidos».

Esto supone una contravención obvia al derecho al trabajo y veremos lo que nos dicen los tribunales, si FIFA impide que haya transferencia de un país a otro (obviamente eso no afectará a los cambios dentro de una misma federación). Y eso son solo dos 'cositas' que nos responde FIFA, aunque hay mucho más. Es decir que el Covid ha golpeado, FIFA ha respondido, pero sin tenerlo claro y, ahora, nos da unas contestaciones que, cuanto menos, son también azarosas...

Ya estamos en fase 3 en la Comunitat Valenciana y, espero, podamos en un par de semanas más, estar en la vía de la normalidad. Mientras, léanse la novela 'La gallera', de nuestro paisano Ramón Palomar, pura dureza en la escritura y en el fondo. Disfruten y #Cuídense.