Levante y Metz han alcanzado un acuerdo para el traspaso de Cheick Doukouré. El centrocampista marfileño, con pasaporte francés, defenderá el escudo de la escuadra azulgrana durante las próximas cuatro temporadas. En Orriols aguardaban en la noche del jueves impacientes la llegada de Cheick Doukouré, prácticamente como si de la víspera del Día de Reyes se tratara. Hay muchas esperanzas depositadas en el internacional por Costa de Marfil. No en vano, es el elegido para ejercer de ´6´, de bisagra en el centro del campo, en una temporada tan exigente como la del regreso a LaLiga Santander. Es el quinto fichaje que oficializa el Levante (Luna, Álex Alegría, Bardhi y Róber han sido los otros cuatro), además de uno de los más costosos de su historia: algo menos de dos millones de euros cobrará el Metz por el que era hasta ahora su capitán, más un posible extra en variables.

Por lo pronto, es el mayor gasto realizado desde el aterrizaje de Tito en la dirección deportiva; techo fijado por Bardhi, con 1,5 millones más 250.000 euros por permanencia. Por él se apostó una vez se había escapado Rubén Pérez. A punto de cumplir 25 años, el centrocampista cuenta con un amplio bagaje en el fútbol francés y una Copa de África (la de 2015) en su currículo. A un año vista de la disputa del Mundial de Rusia, en el que debería ser uno de los pilares de su selección, su incorporación se presentaba como una oportunidad única. Como con Lerma en su día, o el macedonio este verano, el Levante piensa en ellos como refuerzos presentes y posibles ventas rentables futuras.

Doukouré ha firmado por las cuatro próximas temporadas. De acuerdo con su bagaje en la élite, el internacional por Costa de Marfil se convertirá en uno de los jugadores mejor pagados de la plantilla. El africano se despidió en la mañana del jueves de los jugadores, técnicos y demás trabajadores del Metz después del entrenamiento matinal. Llevaba todo el verano ejercitándose con normalidad, pero sin minutos en los amistosos, conscientes tanto él como el club galo de que esa era la mejor decisión con vistas a su traspaso. El inicio de la Ligue 1, que para el Metz arranca este sábado, terminó por acelerar la operación en los últimos días. También el fichaje de su relevo en la plantilla francesa, el portugués Cafú.

Las negociaciones por otros futbolistas, como Ivi y Samu García, se encuentran ya a punto de caramelo para el Levante. Sus llegadas se producirán, salvo giro radical, en cascada para ir dando forma al proyecto granota que volverá a liderar Muñiz. En este hace falta un centrocampista, como queda claro con los contactos mantenidos desde tiempo atrás con Tomás Pina. Quedan otras posiciones por reforzar, como la portería (donde David Soria empieza a agotar su tiempo de espera) o el eje de la zaga, donde debe llegar un central cotizado. Y, sobre todo, en la delantera. Ahí, los granotas siguen decididos a realizar el mayor desembolso, por encima del de Doukouré. Para esa posición, uno de los elegidos no será Santos Borré, que jugará en River Plate.