La historia de Carlos Bacca promete seguir dando más capítulos en cuanto a su futuro se refiere. Si la llegada de Toko Ekambi y Gerard Moreno parecían haber mitigado las opciones del retorno del colombiano, el Villarreal sigue manteniendo la puerta abierta al que fue uno de sus delanteros la pasada temporada y que tan buen recuerdo dejó.

Eso sí, el jugador va a tener que tratar de desbloquear su situación con el Milan. No se antoja como una cuestión sencilla teniendo en cuenta el difícil momento institucional que se está viviendo ahora mismo en San Siro tras la reciente sanción de no jugar competición europea durante la dos próximas temporadas.

El conjunto transalpino se ha mostrado hasta el momento intransigente y pide 15 millones por el cafetero, mientras que en La Cerámica la oferta no va a superar los 8 millones. El Villarreal se ha encontrado además con dos duros competidores en su carrera por contar con el ariete, el Galatasaray y el Trabzonspor. Los clubes otomanos están dispuestos a hacer un gran esfuerzo por Bacca y sí llegarían a las pretensiones italianas. El club groguet cuenta a su favor con la opinión del futbolista que no quiere jugar en Turquía, sino seguir en España donde ha vuelto a recobrar su mejor nivel.

Se espera la salida de Sansone

Enfrascado y centrado en el Mundial, Carlos Bacca tiene previsto tener un cara a cara con los dirigentes rossonero una vez concluya el campeonato ruso y a partir de ahí definir el escenario y los movimientos a realizar, aunque en La Cerámica el papel ahora mismo pasa por esperar acontecimientos. Lo que se tiene claro es que si se diera la oportunidad de contar con el jugador cafetero, antes habrá que dar salida entre otros a Nicola Sansone, para equilibrar de esta manera el apartado económico de la operación. El delantero italiano, salvo algún movimiento inesperado, retornará el próximo lunes a Vila-real a comenzar la pretemporada pese a que lleva ya un par de meses tratando de buscarse una salida en Italia al haber perdido mucho protagonismo en el equipo.

El precio fijado para Sansone ronda los 14 millones de euros, aunque, dado el interés por Bacca podría haber flexibilidad en la negociación para agilizar ambas operaciones. En un complejo juego de cartas todo atisba a una operación que se dilatará en tiempo. Con la pretemporada a la vuelta de la esquina, ya que comienza el próximo lunes, Sansone estará en Vila-real junto a sus compañeros. Una presencia que se atisba temporal y con fecha próxima de caducidad.