El Levante encara la recta final del mercado con la plantilla del primer equipo prácticamente cerrada a expensas de la clásica oportunidad o guinda de última hora. Es, al menos, el mensaje que llega desde Orriols, donde pese a todos los esfuerzos no solo están centrados en encontrarle acomodo a los conocidos descartes de Saveljich, Verza, Samu y Espinosa. Por un lado, el club trabaja a corto plazo en los blindajes de Bardhi y Campaña además de en la renovación de Toño, sobre el papel mucho menos compleja que la hipotética de Jason. Por el otro, en la recámara sigue la opción de apuntalar la defensa con un central además de hacer lo propio en la delantera si se pone a tiro Borja Mayoral.
En este momento, optando por no tramitar la de Sadiku debido a su lesión de gravedad, son 24 las fichas de la primera plantilla sin contar las de los cuatro prescindibles. Por tanto, y teniendo en cuenta que la apuesta de la dirección deportiva es por tres laterales derechos debido a la edad de Pedro López y los problemas físicos de Iván, solo hay sitio para un fichaje más a menos que de aquí al 31 de agosto se produzca alguna salida por ahora inesperada.
Pese a la portería a cero en el Villamarín, donde a la espera de Cabaco fueron Chema y Postigo la pareja de centrales titulares en detrimento de un visiblemente abatido Róber Pier, la secretaría técnica no ha desactivado por completo la posibilidad de apuntalar la zaga. Gestiones en este sentido han seguido habiendo en los últimos días y de hecho alguna llegó a estar bastante avanzada, al tiempo que los técnicos continúan ojo avizor por si las moscas. Con Cabaco en propiedad, Postigo renovado por partidos, Róber de nuevo cedido y Chema con el respaldo de Paco López tras rechazarse por él ofertas de casi cuatro millones, lo cierto es que igual que el año pasado el fichaje de un central de jerarquía sigue sin ser una opción sine qua non. La opinión de Paco López de dejar la defensa tal y como está ahora tiene mucho que ver con esta decisión, pese a que en el club hay quien continúa creyendo que la retaguardia está coja y que al equipo le falta ya no solo un central, sino incluso dos. En un momento dado, eso sí, los técnicos contemplan la posibilidad de que Vukcevic pueda ser tácticamente un tercer central incrustado.
De las primeras gestiones
También de polivalencia puede tirar Paco López en la delantera con jugadores como Morales, pese a que al técnico no le amargaría el dulce de que la ficha libre fuese para Borja Mayoral. La gestión por el delantero del Real Madrid fue de las primeras en las que se embarcó Tito, quien le arrancó una opción preferencial para recalar en el Levante si salía cedido. Sin embargo, el futuro del ´nueve´ continúa siendo una incógnita y está a expensas de que en el Bernabéu fichen o no a un ´nueve´. El internacional sub-21, aunque le habría gustado definir su futuro después de la Supercopa de Europa, es para Lopetegui la única alternativa natural hoy por hoy a Benzema. Su intención es marcharse si no va a tener protagonismo y la opción levantinista la veía con buenos ojos.
Dwamena, autor de una asistencia en su debut, es de momento la gran apuesta para la delantera, pese a que en el Benito Villamarín el titular fue el renovado Roger y además con gol. Boateng, por su parte, podría volver a entrenarse esta semana con el grupo, aunque físicamente tiene que recuperar el tono.
