Hay equipos que tienen el dinero por castigo, especialmente si hablamos de la Premier League. Está claro que nadie gasta tanto como el Manchester City de Guardiola en su búsqueda infructuosa de hacerse con la Champions League y no sería descartable que el próximo mes de enero veamos al nuevo rico Newcastle tirando de chequera para tratar de arreglar la temporada. Sea como fuera, el hecho es que numerosas publicaciones señalan al Chelsea como candidato a realizar uno de los fichajes más caros de la historia del fútbol.

Las intenciones del vigente campeón de la Champions pasan por vender a Pulisic por una cantidad que ronde los 50 millones para, posteriormente, plantear un ofertón de unos 100 por Federico Chiesa. El extremo italiano juega como cedido en la Juventus tras aceptar de la Fiorentina una cesión de dos temporadas por 10 kilos y la obligatoriedad de ejercer su compra el próximo verano por 40. Está claro que en estas dos campañas se ha revalorizado notablemente y su cotización de mercado puede suponer una gran venta que arregle las cuentas italianas.

Renovaciones en marcha

El Chelsea no puede descuidar su actual plantilla, que muestra un gran nivel con jugadores veteranos que, en muchos casos, terminan contrato en verano, por lo que serían libres de firmar por cualquier otro equipo a partir del 1 de enero. Por el momento, sólo ha trascendido la intención de Thiago Silva de aceptar la oferta de los londinenses. Otros defensas fijos como Azpilicueta (capitán), Christensen o Rüdiger todavía no han estampado su firma en un nuevo contrato y novias no les van a faltar. El navarro, uno de los mejores laterales de los últimos años, incluso ha sido relacionado con el FC Barcelona.