La reunión que mantuvieron los expertos financieros de la Federación Internacional del Automóvil (FIA) y de la Asociación de Equipos de Fórmula Uno (FOTA) terminó sin acuerdo, al no tener los segundos una propuesta para discutir la normativa financiera del próximo año 2010.

Tal y como se había acordado en la reunión del pasado viernes 11 de junio, los representantes de financieros de ambas entidades tuvieron ayer el encuentro en Londres, pero al no tener propuestas no se pudo lograr comparar las normas de la FIA con las de la FOTA, para encontrar un punto de acuerdo.

A falta de un verdadero diálogo con los financieros de la FOTA se discutieron las propuestas, pero quedó claro que estos no serían capaces de limitar los gastos de un equipo y otra carrera de armamentos financiera sería inevitable.

Por último la FIA señala en su comunicado sobre esta reunión que el Reglamento Financiero publicado, que limita el presupuesto de los equipos a 47 millones de euros para la próxima temporada 2010, continúa en vigor.

Montezemolo no entiende por qué se quiere "arruinar así esta Fórmula Uno"

El presidente de Ferrari y de la Asociación de Equipos de Fórmula Uno (FOTA), Luca Cordero de Montezemolo, afirmó hoy que no entiende por qué se quiere "arruinar así esta Fórmula Uno", en referencia a las normas que regularán el Mundial desde el año que viene.

"Hemos puesto las condiciones claras para participar en el campeonato y nuestra posición no ha cambiado", aseguró Montezemolo.

Ferrari lidera a un grupo de escuderías de Fórmula Uno que amenaza con no participar en el Mundial del año que viene, a causa de se negativa a las nuevas reglas implantadas por la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), entre ellas un radical recorte de los presupuestos de los equipos.

"Desde el Consejo de administración (de Ferrari) de principios de mayo nuestra posición no ha cambiado, pero no creo que sea útil continuar con las polémicas", aseguró Montezemolo.

La FIA afirmó ayer en un comunicado que algunos miembros de la Asociación de Equipos de Fórmula Uno (FOTA) están decididos a "impedir cualquier acuerdo", independientemente de los "daños" que esto puede causar al deporte.