El español Fernando Alonso (Renault) ha lamentado que el décimo puesto que ha logrado hoy en el GP de Turquía, séptima prueba puntuable para el mundial de F1, se haya producido porque su equipo "va despacio".

"Estamos dónde esperábamos estar. En carrera no ha pasado nada raro. No ha habido coche de seguridad y no hemos tenido abandonos, ni toques. Sabía que era el más ligero y ésta era la estrategia que elegimos. Cuando acaba la carrera es fácil saber cuál hubiera sido la más acertada. Yendo tan despacio, no hay nada que hacer. Lo que nos hace falta es ir medio segundo más rápidos", señaló un Alonso algo apesadumbrado.

"El coche que estamos usando es el mismo que el de Bahrein, así que cualquier modificación que se le haga, bienvenida sea. El coche va peor cada vez, necesitamos mejorarlo. Hay que seguir insistiendo hasta encontrar lo que lo mejore", deseó.

El piloto español ha reconocido que la situación que vive no le es novedosa porque durante la temporada "ha habido momentos mejores y peores", y ha advertido que lo que se ha visto en la pista de Estambul con los Renault ha sido algo previsible dado que la simulación que efectuó la escudería ya le daba puesto décimo.

"Si no hay coche de seguridad ni muchos líos, pues tenemos la posición que nos merecemos. Cuando vamos rápido, las cosas salen bien, pero cuando vamos despacio es normal que quedemos detrás de los rivales. El coche ha ido bien en comparación con el fin de semana. No ha habido ningún problema en especial el domingo. Fuimos lentos el viernes y el sábado, y hoy también", reconoció.

Alonso insistió en que dispone del mismo coche con el que corrió en Bahrein y por ello entiende que, sin mejorar ostensiblemente, "es normal que cada carrera estemos peor".

"Si no mejoramos partes del coche, poco a poco nos irán adelantando. Quizá somos el séptimo mejor equipo y por eso nos correspondería la plaza 14 y 15. Hoy hemos hecho 10 y 16 (Piquet) y esto en Silverstone hay que cambiarlo. Hay que invertir la tendencia y mejorar lo más rápido posible para estar entre los cuatro o cinco mejores equipos y luchar por la sexta o séptima posición", dijo.

Alonso desea que en su escudería se realice alguna propuesta innovadora que mejore las prestaciones de su bólido. "Tenemos los dedos cruzados para que en una carrera de éstas, las evoluciones que implantemos sea mejor de lo esperado. El objetivo es hacer un buen final de año, pero si no se consigue ganar una prueba, no pasa nada", admitió.

El piloto asturiano ha participado hoy en la reunión matinal con los equipos que están integrado en la FOTA, para conocer de primera mano en qué situación se encuentran las negociaciones con la FIA de cara al mundial del año que viene.

Ha desvelado que existe el interés por parte de las escuderías de llegar a un acuerdo con la FIA, y ha expresado que los pilotos "están a tope" con los equipos".

"Nosotros queremos estar en la máxima categoría del automovilismo. Queremos competir con los mejores coches del mundo y con las mejores marcas, y queremos batirnos con los mejores pilotos del mundo, que son los que están ahora en la F1. Ningún piloto ve atractiva la propuesta de la FIA", subrayó.

Cuando se le emplazó a que reflexionase acerca de que tres campeones del mundo (Raikkonen, Hamilton y él) no han puntuado en Turquía, Alonso señaló: "Con todo lo que se está dañando el deporte con todas las disputas que hay, a la gente no le gusta esta F1 de poder, política y discusión. Ojalá lleguen a un acuerdo esta semana para que el año que viene haya una F1 a gusto de todos. Quizá que gane Brawn o Red Bull es menos atractivo".

Al hilo de su reflexión, considera que en cuatro o cinco carreras Jenson Button podría ser proclamado campeón del mundo, ya que se encuentra con 61 puntos, veintiséis más que su compañero, Rubens Barrichello. "Con 100 puntos en los últimos años ya se ha sido campeón del mundo. Le falta poco", dijo.