El brasileño Emerson Fittipaldi, dos veces campeón del mundo de Fórmula 1, admitió que se enfrenta problemas financieros, los cuales han llevado a la Justicia a embargar varios de sus bienes, entre ellos algunos de los coches que pilotó a lo largo de su carrera.

En un comunicado, Fittipaldi aseguró que el volumen de sus deudas "es inferior a su patrimonio" y atribuyó su complicada situación financiera al "inestable" escenario político y económico que atraviesa Brasil.

De acuerdo con el portal de noticias UOL, Fittipaldi, campeón mundial de Fórmula Uno en 1972 y 1974, tiene abiertos más de 60 procesos en su contra en los tribunales por millonarias deudas que tiene pendientes con diferentes bancos y empresas.

El expiloto no divulgó el valor de las deudas, pero según el periódico O Estado de Sao Paulo ascienden a 27 millones de reales (unos 7,5 millones de dólares).

La Justicia le desposeyó de inmuebles, trofeos e incluso el bólido con el que venció en las 500 millas de Indianápolis.

"Los coches de competición y los trofeos conquistados por el bicampeón de Fórmula 1 y de las 500 millas de Indianápolis pertenecen a un museo dedicado a todos los brasileños que aman el automovilismo y, así que la cuestión sea resuelta, volverán a su lugar de origen", añadió en el expiloto en una nota.