El piloto Ryan Blaney se proclamó ganador de la prueba de la Copa NASCAR, que se disputó en el circuito de Talladega Superspeedway, después de que la prueba fuese aplazada el pasado domingo por lluvia.

Junto a Blaney, el gran triunfador moral de la jornada fue el piloto negro Bubba Wallace, quien recibió el apoyo del resto de los 39 corredores que compitieron en la prueba después de que el domingo se encontró en el garaje de su equipo una cuerda colgada del techo.

Blaney se mantuvo a la cabeza después de un reinicio con dos vueltas y obtuvo su segunda victoria consecutiva en Talladega Superspeedway. "Creo que es genial que todos realmente se hayan unido. No quiero que se recuerde como un día terrible o un mal día en NASCAR, sino todo lo contrario, ya que hubo un incidente y todos lo superamos juntos", declaró.

Bubba Wallace estuvo lejos del triunfo en la carrera celebrada este lunes en Talladega, correspondiente a la Copa NASCAR, pero se convirtió en el campeón moral después de recibir el apoyo de sus compañeros en la lucha contra el racismo.

Wallace, de 26 años, el único piloto negro que hay en la NASCAR, que lideró su lucha por erradicar las banderas confederadas de la competencia, se encontró el domingo una soga colgada en el techo de su garaje.

El suceso hizo que este lunes, todos los pilotos, tripulaciones, personal técnico participantes en la carrera, que fue aplazada por la lluvia, le mostraran solidaridad con el gesto de acompañar su coche Chrevolet N.43, del equipo Richard Petty Motorsports, caminando a su lado mientras salía a la pista.

Mientras, los agentes del FBI trabajan en la investigación de averiguar quién ha dejado una soga en su puesto de garaje durante el fin de semana.

La acción ocurrió menos de dos semanas después de que la NASCAR prohibió la bandera confederada en sus propiedades a instancias de Wallace y se ha comprometido a prohibir permanentemente a la persona responsable de poner la soga.

Wallace, de 26 años, estaba rodeado por los otros 39 pilotos en los momentos previos a la carrera y sus equipos se unieron a ellos en una marcha por la calle de pits, mientras empujaban su número 43 al frente de la línea. Wallace salió de su auto y lloró. "Como todos saben, esta es una familia tan grande en el área del garaje", comentó el siete veces campeón de la Copa NASCAR, Jimmie Johnson a la televisión antes de la carrera. "La noticia realmente nos ha inquietado a todos".

Johnson dijo que "por supuesto que queremos justicia. Queremos entender quién y por qué y todas esas cosas. Hasta que se respondan esas respuestas, queremos apoyar a nuestro amigo Bubba como lo hemos hecho desde que se dio el incidente, que no se sienta solo porque no lo está".

El miembro del Salón de la Fama de NASCAR, Richard "The King" Petty, que tiene a Wallace como su piloto, estuvo presente en la carrera para darle el apoyo durante la interpretación del himno nacional.

Petty, de 82 años, que el próximo mes cumple 83, ya había dado a conocer un comunicado antes de su llegada a Talladega para pedir que la "persona enferma" fuera expulsada de NASCAR para siempre, una medida que el presidente de NASCAR, Steve Phelps, insistió que sucederá cuando descubran a los responsables de poner la soga en el garaje de Bubba.

Los organizadores de la carrera permitieron el ingreso al circuito de Talladega Speedway de 5.000 aficionados, solo la segunda en la que hay público en las gradas desde que NASCAR regresó del cierre forzado por la pandemia del coronavirus.

Pero la asistencia fue significativamente menor el lunes después del aplazamiento de un día debido a la lluvia.

Los trabajadores pintaron "#IStandWithBubbaWallace" en el césped del campo antes de la carrera y no se veían banderas confederadas dentro de la instalación que normalmente recibe a más de 80.000 aficionados.