Hamilton acaba la carrera cojeando y Wolff señala a Alonso

La dureza del Gran Premio de Fórmula 1 en Bakú ha sido extrema para algunos pilotos. Al menos así lo ha hecho saber Lewis Hamilton durante toda la carrera, debido al 'porpoising'. El piloto británico ha terminado la prueba con dificultades para andar e incluso con dolor de espalda tal y como ha reconocido. Asimismo Toto Wolff también ha recalcado este problema en su W13, sin embargo por octava carrera consecutiva y además haciendo pleno, George Russell puso al otro Mercedes en el TOP5 y con un nuevo podio. ¿Funciona más un coche que el otro o hay algo de vodevil para presionar a la FIA? Pues eso, los toma y daca del Gran Circo.

No obstante es una realidad que Lewis Hamilton realizó una gran carrera en la capital azerí. El de Stevenage logró un gran cuarto puesto, minimizando errores y con un buen ritmo. Sin embargo el este problema en el Mercedes ha dejado al piloto algo 'tocado' físicamente: "Me está matando la espalda".

Sin embargo pese a las quejas por radio a su ingeniero de pista, las imágenes más impactantes del heptacampeón del mundo fueron al bajar de su monoplaza. Hamilton tuvo problemas para sortear el halo y salir del coche, mientras cojeaba aparentemente por el 'pit lane' hasta el box de su equipo.

Toto Wolff apunta a Fernando Alonso sobre el tema del 'porpoising'

El jefe de Mercedes también ha hablado sobre el 'efecto rebote' después del GP y cómo está afectando a sus pilotos. Este se ha mostrado preocupado y ha asegurado en Sky Sports que en una reunión mantenida con el resto de pilotos todos estuvieron de acuerdo en tomar medidas, menos Fernando Alonso: "Todos los pilotos se han juntado y están de acuerdo en que esto es un problema excepto uno. Alonso". Esto aseguraba un Toto Wolff que sin ir más lejos se quejó del 'trenecito' que formó Alonso en el GP de Mónaco. La guerra entre ambos está abierta.

Según explica el jefe de Hamilton es un problema que no sabe sin podrán resolver de cara al GP de Canadá de la próxima semana "especialmente con los baches hemos visto cuánto le afecta". Asimismo sorprende el paso atrás que ha dado Mercedes en ese sentido, puesto que en el GP de España parecían haber resuelto o, al menos minimizado los efectos. No obstante las 'flechas plateadas' están teniendo dolores de cabeza con el 'efecto rebote' desde el día 1 de la pretemporada.

Desde el inicio de la pretemporada uno de los equipos que más fuerza ha hecho para que no se hicieran demasiados cambios ha sido Alpine. La FIA permitió a algunos equipos utilizar unos flexores que unieran el fondo del coche con el chasis para evitar que la amplitud del porpoising afectara en exceso al rendimiento. La escudería de Enstone se quejó por este aspecto ya que ellos argumentaban que había construido un monoplaza más rígido, pensando evitar ese problema desde el inicio de la temporada.

“No diría que nosotros fuimos más inteligentes y que diseñamos el coche en torno al porpoising. Diseñamos nuestro monoplaza con el único objetivo de obtener el máximo rendimiento posible, pero aceptando que iba a ser un poco más pesado y que iba a tener un poco de sobrepeso. Pusimos mucha rigidez en el suelo del coche porque nuestro chasis más ancho en la parte superior también nos permitía una instalación más rígida. Así que siendo sincero, eso nos ayudó". aseguró Pat Fry, director técnico del equipo francés, a motorsport.com.

La ‘traición’ de la FIA a Fernando Alonso y Alpine

La guerra entre ambas escudería está abierta y muy encendida tras lo visto en el GP de Mónaco. Alonso '"ralentizó" a Hamilton y después este hizo lo propio con Ocon para dejarlo fuera de los puntos por su sanción de 5 segundos. Alonso al ser cuestionado sobre este problema durante el sábado del GP en Bakú aseguró que para él no había ningún problema en ese sentido: "Espero que lo solucionen por los jóvenes, yo puedo aguantarlo unos años". Un desafío que parece un mensaje claro para la voluntad de Mercedes, Wolff y Hamilton de que haya un cambio en el reglamento técnico sobre este aspecto.

Una postura, la de Mercedes, que entiende el que fuera su rival el pasado año, Christian Horner. El responsable de Red Bull ha echado un capote a Wolff, pero definitivamente se ha posicionado junto con Alonso: "Entiendo sus quejas, si fuera su jefe les diría que lo hicieran. Hay soluciones para el 'porpoising', aunque afecte al rendimiento del coche. Lo más fácil es quejarse".