Preocupación por el delicado estado de salud de Kiko Hernández

Kiko Hernández no está bien. El colaborador de Sálvame sigue conmocionado por la muerte de su amiga Mila Ximénez, problema que se une a sus actuales problemas de salud que han preocupado a la audiencia del programa. Kiko se ha visto muy limitido por su enfermedad, de hecho, ha tenido que mudarse de casa. Esta enfermedad que confesó hace unas semanas, le provoca importantes problemas de movilidad, además de ser doloroso. 

Se trata de artritis psoriásica, una dolencia degenerativa y autoinmune que, en su fase más aguda, le incapacita casi totalmente y, como Kiko relataba en 'Sálvame', le impide incluso subir escaleras, de ahí que se haya mudado a una casa más accesible que en la que residía hasta hace un mes, de cuatro plantas. "Había noches que me quedaba a dormir en el salón porque era incapaz de subir cuatro pisos", desvelaba, explicando que dicha enfermedad es el motivo de que luzca a menudo unos guantes compresores, que le han hecho la vida muy fácil para poder cargar algo de peso.

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A pesar de que sigue al pie del cañón diariamente en 'Sálvame' e intenta disimular el mal momento que está atravesando, Kiko Hernández abandonaba las instalaciones de Mediaset este miércoles con evidentes dificultades para caminar con normalidad. El colaborador tuvo que apoyarse en una compañera para poder andar hasta el coche que le llevaría de vuelta a su domicilio, demostrando cómo la artritis psoriásica que padece ha limitado notablemente su vida.

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