Los motivos de Rusia para atacar a Ucrania

Vladimir Putin ha decidido que es tiempo de guerra y ha ordenado a las tropas de Rusia que comiencen una invasión tras concluir los JJOO de invierno en Beijing

Putin.

Putin. / EFE

Javier Bengoa

Javier Bengoa

Vladimir Putin ha decidido que es tiempo de guerra y ha ordenado a las tropas de Rusia que comiencen una invasión a Ucrania, territorio vecino. El presidente ruso llevaba años amenazando con tomar el país por la fuerza, aunque la presencia de Donald Trump en la Casa Blanca y las negociaciones mantenidas entre ambos enfriaron la situación. Ahora, con Biden al frente de EEUU y con la fragilidad de las respuestas por parte de Europa y la OTAN, ha terminado por estallar el conflicto armado de manera unilateral. Eso sí, Putin esperó a que terminaran los JJOO de invierno en Beijing (China) el pasado domingo 20 de febrero para no eclipsar mediáticamente a su mayor socio político.

El principal argumento expuesto por Putin para invadir a su vecino es, literalmente: "desmilitarizar y desnazificar Ucrania para defender a las personas de abusos y de genocidio". Este argumento, que carece de toda lógica a tenor de lo ocurrido tanto en el pasado como en la actualidad, es parte de la exigencia de Putin a la OTAN de no aceptar el ingreso en la misma de Ucrania, como ya hicieron en el pasado otros territorios liberados de la URRS como Lituania, Letonia o Estonia y que desde 1991 dejaron de estar bajo el yugo de la dictadura del partido comunista soviético. El poder militar de Rusia es incuestionable y tiene en los EEUU a su oposición, viendo a la OTAN como un aliado de estos. Recordemos que el propio Putin fue agente de la KGB, el ala dura del partido y contraria también a que Ucrania pase a integrar parte de Europa, algo que ya intentaron sin éxito en 2013.

De la misma manera que la mayoría de los rusos están en contra de esta guerra, existe una minoría de ucranianos que sí defienden el ataque ruso contra su propio país. Se trata de los independentistas radicales de Donbás, a los que Putin también utiliza como excusa.

Rusia bombardea Ucrania e inicia la invasión

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"Ucrania es parte inalienable de nuestra propia historia. Estos son nuestros camaradas, los más queridos para nosotros", defendió Putin. "Nuestro parentesco se ha transmitido de generación en generación. Está en los corazones y en la memoria de las personas que viven en la Rusia y Ucrania modernas. Juntos siempre hemos sido y seremos muchas veces más fuertes y exitosos", añadió el líder comunista. Estos argumentos son prácticamente los mismos que expuso el nacionalsocialista Adolf Hitler poco antes de que se iniciara la II Guerra Mundial para poder anexionarse territorios como Austria o los Sudetes.

El origen de Rusia no podría entenderse sin Ucrania, ya que se remonta al siglo IX con el Rus de Kiev, algo que se tuvo muy presente incluso en la creación de la Unión de las Repúblicas Socialistas Soviéticas allá por 1922 bajo el poder de Vladimir Lenin y que se mantuvo hasta que en 1991 concluyó con su disolución y reconstrucción de las fronteras.

Holodomor: Limpieza étnica de la URSS en Ucrania

En este sentido, el mandatario omite la limpieza étnica que realizó la URSS, especialmente en 1933 con el Holodomor, en la que se asesinaron a 4 millones de ucranianos oficialmente y hasta 12 millones de manera extraoficial. A su vez, se hizo todo lo posible por eliminar el idioma dominante entonces en Ucrania para imponer el ruso. Durante muchos años tuvo cierta importancia el movimiento nacionalista ucraniano que combatió (sin éxito), tanto la invasión nazi como la soviética.

Campaña mediática de Putin para tratar de "nazis" a los ucranianos

Desde Rusia se lleva años intentando acusar de nazis a los gobiernos de Ucrania, independientemente de que no tengan nada que ver con ello o que incluso lucharan contra estos en el pasado. Todo es una estrategia del mandatario estalinista para medrar internacionalmente la opinión pública y tratar de justificar acciones como la ocurrida en 2014 en Crimea o la invasión de ahora. Lo cierto es que el gobierno democrático del país es de centro. El presidente ucraniano es Volodímir Zelenski, de 44 años y origen judío. Tras estudiar Derecho, hizo carrera como humorista y arrasó en las elecciones con un 77% de los votos en segunda ronda. Lo cierto es que desde ciertos sectores políticos se intenta colocar ahora a Putin de manera errónea como afín a lo que en Europa se considera "derecha", algo bastante alejado de la realidad de un ex KGB que considera todo un fracaso la desintegración de la URSS, permite y refrenda marchas leninistas e imita modelos estalinistas.

Putin defendió el papel indispensable que jugó Rusia en el desarrollo económico y social de Ucrania, y argumentó en su discurso que tanto Rusia como Ucrania forman un único sistema económico. "La profunda cooperación que tuvimos hace 30 años es un ejemplo que la Unión Europea debe admirar. Una relación tan estrecha puede fortalecer las ventajas competitivas, aumentando el potencial de ambos países", sentenció Putin con la esperanza de que ningún país u organización externa le haga frente en sus planes bélicos. Las sanciones económicas contra Rusia por parte del resto del mundo no parece importarle al mandatario ruso, que tiene la sartén por el mango, ya que encarecerán las exportaciones de gas y petróleo entre otros materiales vitales para las economías de países desarrollados. Además, quitándose a Ucrania de en medio, sacará mayor rédito económico de sus gaseoductos.

Invasión de Crimea y Sebastopol

Hay que remontarse a marzo de 2014, cuando Ucrania estaba intentando entrar en la OTAN y Rusia hacía todo lo posible por evitarlo, movilizando incluso a sus afines para provocar manifestaciones públicas por Kiev y obligar al presidente a dar un paso atrás al respecto. Mediante una crisis e intervención militar rusa, la península de Crimea fue incorporada a Rusia como sujeto federal, mientras que Sebastopol lo hizo como ciudad federal. Evidentemente se hizo de manera unilateral y forzada por el gobierno de Putin, por lo que ni Ucrania ni la inmensa mayoría de la comunidad internacional reconocen el territorio como la 'República de Crimea' que sostiene Rusia como títere.