Cuatro edulcorantes muy comunes que la OMS desaconseja por motivos de salud
Muchos consumidores han recurrido a los edulcorantes artificiales como una alternativa para satisfacer su deseo de dulces sin tener que preocuparse por el impacto en su salud
Cuchara de azúcar. / SD
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha destacado que la ingesta excesiva de azúcar es una de las principales causas de enfermedades no transmisibles, como la diabetes tipo 2, la obesidad y la enfermedad cardiovascular. Por esta razón, muchos consumidores han recurrido a los edulcorantes artificiales como una alternativa para satisfacer su deseo de dulces sin tener que preocuparse por el impacto en su salud.
Sin embargo, no todos los edulcorantes son iguales. La OMS ha identificado varios edulcorantes que pueden ser perjudiciales para la salud y que deben consumirse con moderación o evitarse por completo.
Aspartamo
El aspartamo es uno de los edulcorantes artificiales más utilizados en todo el mundo. Se encuentra en muchos productos alimentarios procesados y bebidas dietéticas, y se utiliza como sustituto del azúcar. Sin embargo, la OMS ha identificado el aspartamo como uno de los edulcorantes más perjudiciales para la salud.
El aspartamo se ha relacionado con un mayor riesgo de cáncer y enfermedades cardiovasculares, así como con trastornos neurológicos y del comportamiento en algunas personas. Aunque se ha demostrado que es seguro en cantidades moderadas, la OMS recomienda limitar su consumo.
Acesulfamo-K
El acesulfamo-K es otro edulcorante artificial que se utiliza comúnmente en alimentos y bebidas dietéticas. Aunque se considera seguro para el consumo humano, la OMS ha identificado algunos riesgos asociados con su uso a largo plazo.
En estudios con animales, se ha demostrado que el acesulfamo-K puede afectar la función de la tiroides y causar cambios en el ADN. Aunque se necesita más investigación para determinar si estos efectos son significativos en humanos, la OMS recomienda limitar el consumo de acesulfamo-K.
Sucralosa
La sucralosa es un edulcorante artificial que se encuentra en muchos alimentos y bebidas procesados, así como en productos endulzantes. Aunque se considera seguro para el consumo humano, la OMS ha identificado algunos riesgos asociados con su uso a largo plazo.
En estudios con animales, se ha demostrado que la sucralosa puede afectar la función de la tiroides y causar cambios en el ADN. Aunque se necesita más investigación para determinar si estos efectos son significativos en humanos, la OMS recomienda limitar el consumo de sucralosa.
Ciclamato
El ciclamato es un edulcorante artificial que se ha utilizado durante décadas en muchos alimentos y bebidas dietéticas. Aunque se considera seguro para el consumo humano en cantidades moderadas, la OMS ha identificado algunos riesgos asociados con su uso a largo plazo.
En estudios con animales, se ha demostrado que el ciclamato puede causar cáncer de vejiga y otros efectos adversos en la salud. Aunque estos efectos no se han observado en humanos, la OMS recomienda limitar el consumo de ciclamato.
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