Problemas para los directores de Sálvame. Carlota Corredera y David Valldeperas se han despedido de su labor al frente del programa de Mediaset, ¿el motivo? están siendo investigados en una macrooperación policial por un supuesto “delito de descubrimiento y revelación de secretos”. Así lo asegura el diario El Mundo, que informa de que las autoridades llevan cuatro años investigando informaciones privadas de famosos y que han puesto el punto de mira en algunos rostros del formato y también de la productora La Fábrica de la Tele, de la que Mediaset es copropietaria.

Bajo el nombre de ‘Operación Deluxe’, la Policía trata de averiguar cómo se producían las consultas sobre distintos famosos que supuestamente las hacía un agente en la base de datos de la Dirección General de la Policía. El citado medio defiende que ese agente estaría vinculado a Gustavo González, cuyo padre sería amigo del trabajador. El objetivo era crear contenido televisivo y El Mundo entiende que algunos redactores conocían la existencia de esta relación y de cómo llegaba a sus manos la información. Además de Gustavo González, los directores del programa 'Sálvame', Carlota Corredera y David Valldeperas, podrían estar entre las ochos personas que están siendo investigadas.

Los teléfonos de los involucrados fueron pinchados y existen comprometidas conversaciones de Whatsapp en las que se guardan, incluso, vídeos sexuales que proceden de distintos rostros conocidos. La información era obtenida presuntamente a través de consultas en la base de datos de la Policía Nacional, una práctica para la que se debe tener un permiso especial o una justificación, por lo que el hecho de consultarla ya supone una infracción. Si esta información, además, ve la luz, sería un delito penal de descubrimiento y revelación de secretos con penas de prisión entre 1 y 3 años más una multa económica.

Comunicado oficial

Ante el gran revuelo que han causado las informaciones, la productora ha emitido un comunicado en el que ofrece explicaciones. “La Fábrica de la Tele y las personas que la integran han actuado siempre en el marco de la ley y dentro de su actividad periodística y en el legítimo ejercicio de derecho a la información, por lo que son absolutamente falsas las atribuciones de actividad de espionaje”, arranca el escrito, que trata de disipar cualquier duda en torno al proceder de quienes integran la productora.

“Ni la policía ni ninguna autoridad judicial ha adoptado ninguna medida de investigación respecto a la Fábrica de la Tele. Ninguno de los documentos que figuran en el procedimiento judicial proceden de ningún archivo o dispositivo de la productora; ni ninguno de los miembros del equipo de redacción de Sálvame ni de ninguno de los programas que produce. Y las informaciones que apuntan en esa dirección son falsas”, concluye el comunicado.